Desde la semana pasada se han registrado lluvias de moderada intensidad en sectores del sudeste de Santa Fe, sudoeste y este de Córdoba, centro y sudeste de Buenos Aires y sectores del norte y oeste de Santiago del Estero; el resto de la región agrícola sólo recibió precipitaciones escasas o nulas.
En resumen, las zonas con mayor fortuna obtuvieron un alivio momentáneo respecto del estrés hídrico, mientras que las regiones que no recibieron precipitaciones se ven actualmente agravadas por el ascenso térmico registrado durante los últimos siete días. El panorama actual ya estaba contemplado en la primera proyección de producción, estimada en 50.000.000 de toneladas, dado que el informe climático de la semana previa ya anticipaba altas temperaturas y precipitaciones moderadas a escasas sobre la mayor parte de la región agrícola.
A la fecha en la región NOA se están relevando, no sólo pérdidas de rendimiento, sino también de superficie como consecuencia del prologado déficit hídrico acompañado de altas temperaturas. En la vecina región del NEA, el déficit hídrico se vio atenuado por lluvias de moderada a baja intensidad relevadas hacia fines de enero; pese a ello, las altas temperaturas registradas durante las últimas semanas acentúan la necesidad de reponer, de forma efectiva y a largo plazo, la humedad en los cuadros sembrados.
Es importante recordar que ambas regiones, NOA y NEA, aportan en conjunto una superficie estimada en 3,37 millones de hectáreas, cifra que representa poco más del 17 % de las 19,7 millones de hectáreas sembradas en toda el área agrícola durante la presente campaña. Debido a ello, una pequeña merma productiva en una o en ambas regiones, provoca indefectiblemente un impacto negativo sobre la proyección de producción nacional.
En el Centro-Norte de Santa Fe la condición del cultivo de primera y de segunda varía de normal a regular, a pesar de haber recibido precipitaciones de moderada intensidad durante las últimas semanas. Hacia el Centro-Norte de Córdoba, los cuadros de primera transitan etapas críticas para la formación de rendimiento, comprendidas entre inicios de fructificación (R3) e inicios de llenado de grano (R5). En esta región, la oferta hídrica en la mayor parte de la superficie implantada varía de regular a escasa. Por último, en el extremo sur y sudeste de Córdoba, en extensas áreas de La Pampa y del centro-norte de Entre Ríos, como así también en el oeste, sudoeste y sur de Buenos Aires, tampoco lograron recuperar humedad durante los últimos siete días. En consecuencia, sobre gran parte de estas regiones se acentúa el deterioro del cultivo.
Según el informe climático, durante los próximos siete días podrían registrarse lluvias de abundantes a muy abundantes (25 a 75 mm) sobre la mayor parte del NOA, Chaco y norte de la región pampeana. Mientras tanto, el sur de Santiago del Estero, el Norte y Centro de Santa Fe y el sur de la región pampeana observará precipitaciones escasas (menos de 10 mm).