El informe semanal de Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, destaca el factor climático como punto de alerta para el mercado de granos local.
"Las reservas están declinando, aunque todavía la situación no es preocupante", estima Romano.
"Los aceites que habían repuntado se estabilizaron, y la harina de soja mejoró dando un espaldarazo al poroto. Esto último sería por el clima seco que se espera para Argentina. Esto se combinó con una posición vendida muy fuerte de fondos especulativos en harina de soja, mercado en el que nuestro país es el principal exportador. También en poroto están muy vendidos, y esta situación amerita sumar premio climático", considera.
Con respecto al maíz, destaca el rápido ritmo de ventas 23/24, y un avance algo lento de las ventas de la cosecha nueva. En soja, en tanto, ambas se producen a un ritmo bajo. "Los cultivos avanzan con buenas condiciones hasta el momento", agrega el especialista de la Universidad Austral.
A la vez, se pasó área de soja a maíz, fruto del margen relativo que apoya a los cultivos, "pero hablamos de una variación de 300.000 ha (sintonía fina). Lo que realmente preocupa es que la humedad del suelo es deficitaria para gran parte de la zona agrícola, las reservas vienen bajando, y los pronósticos hablan de 20 días con lluvias menores. Esto ocurre justo para el inicio del período reproductivo de la soja de primera en nuestro país. De todas formas, no todo está dicho. Como se mencionó los cultivos vienen muy bien, y los pronósticos pueden mejorar", explica Romano.
"El maíz temprano ya pasó la floración con buenas lluvias, y la humedad en las plantas y el suelo generan un piso de rindes. Sin dudas, las dificultades las enfrentarán el maíz tardío y la soja de segunda que se están sembrando, pero tienen tiempo para reponerse. En el caso de la soja de primera, enero es cuando comienzan los estadios reproductivos y donde se vuelven más sensibles al clima", detalla.
A la luz de todo esto, el investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral recomienda "ser conservadores con el nivel de ventas por el riesgo climático, pero quienes vienen muy atrasados en ventas deberían aprovechar la volatilidad para tomar precio en caso de que los números se acomoden un poco. Si bien los precios pasaron de la zona de 260 a 270, todavía no resultan tentadores".
Sin embargo, Romano destaca la expectativa de una baja en derechos de exportación que podría sumar en soja entre 20 y 30 U$S/tn, dependiendo de qué tanto baje la alícuota. "No es claro si esto pasará en mayo o en noviembre, pero si vemos una recuperación de precios la venta podría acompañarse con compra de CALL por las dudas. Cuanto más lejanos el CALL que se compre mejor, pero también será más caro", concluye.