Huracán nadó, nadó y terminó ahogándose en la orilla. Jugó mejor durante casi todo el partido, aguantó el suplementario, pero en la definición por penales vio cómo se le escapó la posibilidad de conquistar la Copa Sudamericana ante Independiente Santa Fe, en El Campín, de Bogotá.
Huracán jugó un buen primer tiempo, presionando en bloque y cortándole a su rival todos los caminos hacia Marcos Díaz. Ya al minuto Abila se perdió un gol que bubiera complicado el desarrollo del encuentro a Independiente Santa Fe. Con la movilidad de Bogado, la prodigalidad de Vismara, el manejo de Toranzo y Montenegro, y la peligrosidad de Espinoza y "Wanchope" Abila, Huracán controló el partido en el mediocampo.
Independiente Santa Fe se mostró impreciso y sólo Seijas pudo sobresalir del resto. En el complemento el local se adelantó, sin embargo no supó interpretar las jugadas y llegó en contadas ocasiones con cierto peligro.
Huracán comenzó a sentir los efectos de la altura y el cansancio, retrocedió en el campo y se afirmó en defensa para aguantar el resultado. Con Santa Fe sin ideas para atacar y con Huracán aguantando y tratando de salir de contra se llegó al alargue. Acá nada cambióy los penales sentenciaron el triunfo de Independiente Santa Fe y la desilusión de Huracán, que vio escapar la posibilidad de conquistar su primer título internacional.
