"Será un golpe más”. Con esa frase, los productores de granos de la provincia sintetizaron el efecto del próximo aumento de un 30% del impuesto Inmobiliario en la provincia, aplicable en 2015. Dirigentes de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT) solicitaron al Gobierno que elimine, reduzca o difiera por seis meses el ajuste de esa obligación tributaria, debido a que los agricultores no podrán “encarar” una variación de esa proporción, teniendo en cuenta las negativas proyecciones de la nueva campaña (2014-2015).
Los referentes de la entidad expusieron las dificultades del sector en una reunión que mantuvieron con el ministro de Economía, Jorge Jiménez, en la Casa de Gobierno. “Son momentos muy difíciles para el productor y no van a poder encarar un incremento de esta magnitud, teniendo en cuenta que no se sabe cuál será el resultado de la próxima campaña”, dijo José Ignacio Lobo Viaña, vicepresidente primero de la SRT, tras el encuentro. “Estamos ante una temporada de nula o escasa rentabilidad. Venimos de tres años complicados (por sequía), que llevaron a un proceso de endeudamiento grande en la actividad. Es muy difícil absorver mayor presión impositiva”, añadió.
Los dirigentes salieron de la audiencia con el funcionario, a la espera de la respuesta oficial a la demanda. El compromiso fue retomar el diálogo durante la próxima semana. “Planteamos la gravedad del escenario, ya que el sector político no tiene en cuenta la actual situación. Todavía se cree que el campo tiene y sigue ganando plata. Y esa no es la realidad de Tucumán”, aclaró Lobo Viaña. Luego agregó: “esta coyuntura es consecuencia de la baja del precio internacional, la suba de costos de producción y de una presión impositiva que se hizo insostenible. Pedimos, tanto a nivel nacional como provincial, que bajen la presión fiscal porque hay condiciones que no manejamos, tampoco ellos. Para poder seguir produciendo debemos adecuar los números al escenario internacional”.
El ministro de Economía afirmó esta semana que no habrá variaciones de las alícuotas de los impuestos tributarios, aunque ratificó el revalúo inmobiliario (actualización de los valores de la propiedad). El ajuste en el régimen catastral implicará una suba del 30% del Inmobiliario. Según Jiménez, habrá incrementos del 24% y 25% de la tasa Automotor.
La Federación Económica de Tucumán (FET) había solicitado que no haya otras variaciones impositivas y planteó la necesidad de efectuar cambios en el Código Tributario. “El ministro dijo que no habrá aumentos de las alícuotas ni crearán nuevas obligaciones que atenten contra la economía de Tucumán”, había dicho Pedro Omodeo, titular de la FET.
Las estimaciones contemplan un gasto de producción de alrededor de U$S 700 por hectárea de soja (con arriendo) y de U$S 580 (tierra propia), y en momentos en que los productores no cuentan con capacidad de crédito. La proyección para el maíz es de U$S 860 y U$S 730, respectivamente. “El productor que está muy golpeado no llegará a pagar el impuesto. Veremos qué hará aquel que sigue en carrera”, concluyó Lobo Viaña.