Es previsible que en la zona caiga la superficie del trigo ante el quebranto proyectado y a la falta de señales de cambio en las retenciones y en la política de intervención del mercado de exportaciones, ambas responsables de los bajos precios.
En las proyecciones para siembra en campo propio por administración, el trigo, con un precio a cosecha de u$s 127/t en el MAT, requiere un rinde de indiferencia para cubrir el total de costos y "salir hecho" de 70 qq/ha. No existe forma de alcanzar este rinde promedio en la zona, aun con un clima perfecto.
La soja de segunda sobre trigo proyecta quebranto, con un rinde de indiferencia de 24 qq/ha. Para el maíz el quebranto es muy importante, y se necesita un rinde (para salir hecho) de 127 qq/ha. Aun con clima perfecto, sólo algunos campos logran estos promedios, pero no es alcanzable como promedio a nivel zonal. La soja de primera también proyecta quebranto y el costo total en quintales es del orden de 37 qq/ha. En girasol, en tanto, se necesitan 27 qq/ha para salir hecho.
Las proyecciones en campo arrendado son más complicadas. Los precios de arriendo se estimaron en 6 qq/ha en soja de 1ª, trigo/soja de 2ª y girasol (3 qq/ha menos que los valores negociados en la última campaña). Para el maíz se estimaron 5 qq/ha de valor de arriendo. Los rindes de indiferencia son de 73 qq/ha en trigo, 25 qq/ha en soja de segunda y 122 qq/ha en maíz. El rinde de indiferencia de girasol es del orden de 26 qq/ha, y en soja de primera se necesitan 37 qq/ha para salir hecho. Ante este contexto, es sumamente difícil la negociación de los precios y modalidades de arriendo.
Con un valor FOB actual para el trigo en u$s 226/t, el monto de retención a la exportación es de u$s 52/t, que para un rinde de 30 qq/ha equivale a u$s 156/ha. Además, la política de cupos en la exportación genera excedentes que no pueden ser absorbidos por el mercado interno. Esto provoca que molinos y exportadores compren a precios con descuentos adicionales sobre el precio de paridad de exportación (FAS teórico).
Con un FAS teórico en el orden de u$s 158/t, y un precio de mercado en u$s 111/t, el descuento es de u$s 47/t. Para un rinde de 30 qq/ha, este descuento equivale a u$s 141/ha.
La retención y el descuento sobre el FAS suman u$s 297/ha para un rinde de 30 qq/ha. Esta cifra supera por muy poco (u$s 52/ha) al quebranto proyectado para el trigo en campo propio con 30 qq/ha.
Las cifras muestran a las claras que el trigo no es viable con retenciones y cupos de exportación.