En el maíz de segunda siembra, la afectación por las lluvias se produjo porque "los sembrados más tarde tuvieron dificultades por los excesos hídricos, que ocasionaron, entre otras cosas, la aparición de hongos. Les aplicamos dos tandas de fungicida y la están peleando, pero sus rendimientos seguramente se ubiquen en torno a los 3.000 kilos, es decir la mitad de los que no tuvieron problemas", indicó Miguel Carbajal, directivo de la Asociación Uruguaya de Siembra Directa (Ausid).
Carbajal sostuvo que está afectado el 30% del maíz de segunda. En esta zafra de cultivos de verano, más de la mitad del maíz sembrado fue de segunda.
El directivo de Ausid también explicó que aquellos que estaban con mayor desarrollo al momento de las copiosas precipitaciones, si bien su estado es desparejo, las expectativas de rendimientos son buenas. Se estima que los mismos se ubicarán entre 5.500 y 6.000 kilos por hectárea.
Otro problema para este cultivo se dio por las altas temperaturas y escasas lluvias registradas en diciembre, que "fueron fatídicas. En muchas chacras antes de hacer una cosecha menor a los 2.000 kilos por hectárea, los productores prefirieron picarlo y hacerlo silo para ganado", dijo Carbajal.