Los productores cañeros de Jujuy y Salta se encuentran al borde del quebranto. Como consecuencia de la sequía ya habrían perdido más de $1.500 millones de pesos y advierten que las pérdidas llegarían al 50% de la producción. Desde el sector solicitaron a los gobiernos medidas urgentes para paliar la crisis de esta actividad de la cual dependen miles de fuentes de trabajo.
En este sentido desde la Unión de Cañeros Independientes de Jujuy y Salta (Ucijs) alertaron que "la situación del sector cañero es muy critica y especialmente de los productores cañeros independientes". Y advierten que "el impacto podría ser mayor porque la falta de macollo en los cañaverales anuncia pérdidas de más del 50% de la producción para la zafra 2022 que comenzaría en el mes de mayo".
A la sequía se sumó "la falta de financiamiento, precios bajos, insumos caros, altas cargas impositivas, entre otros factores, que no permitieron hacer renovaciones de cañaverales y en muchos casos tampoco se les dio la atención mínima a las plantaciones", agregaron desde la entidad.
Como consecuencia de la extensa sequía que viene de la campaña anterior: "las pérdidas de los productores hasta el momento ya superan los $1.500 millones de pesos. Situación que los coloca económicamente al borde del quebranto". Razón por la cual "le solicitamos a los gobiernos medidas urgentes para afrontar esta difícil situación y así poder garantizar la continuidad de la producción y las miles de fuentes de trabajo que dependen de esta actividad", sostuvieron.
MEDIDAS URGENTES
Para atender la problemática del sector, advertida por los productores, recientemente se conformó una Mesa Regional de la Producción Azucarera: integrada por las carteras de producción de los Gobiernos de Jujuy y Salta, representantes de la Unión de Cañeros Independientes de Jujuy y Salta, y de los Ingenios Azucareros de ambas provincias, entre otros actores vinculados al sector.
En la oportunidad, la Unión de Cañeros Independientes de Jujuy y Salta, les solicitó a las autoridades gubernamentales, que se arbitren los medios necesarios para que juntos se puedan hacer frente a esta difícil situación con medidas de corto, mediano y largo plazo.
Entre las acciones a corto plazo: plantearon la necesidad de contar con el diferimiento o baja en los aportes patronales, diferimiento o eximición del pago del impuesto a las ganancias, otorgamiento de créditos para renovación de cañaverales con tasas bajas y periodos de devolución acorde a los ciclos productivos, búsqueda de créditos a largo plazo con periodos de gracia para inversión en nuevas y mejores tecnologías de riego, desgravar la actividad del impuesto a los ingresos brutos, condonar el impuesto inmobiliario y canon de riego hasta finalizar la emergencia, baja de impuestos en la energía eléctrica para poder hacer uso del bombeo lo que hace al riego más eficiente y rápido
Y entre las acciones a largo plazo señalaron la necesidad de realizar obras de captación y almacenamiento de agua (diques) y mejorar las ya existentes, revestimiento de canales y mejorar la conducción para evitar pérdidas, mejoramiento en las tomas de agua de los consorcios de riego, créditos para perforación de pozos.