Las lluvias que acompañan las semanas clave de la actual cosecha gruesa generaron dos fenómenos concatenados. Ante las condiciones adversas, con anegamiento e inundación de campos incluidos en el inicio de la campaña agrícola, los productores privilegiaron la recolección de los campos de soja por sobre los de maíz. Eso derivó en un fuerte atraso en la trilla de la superficie maicera, que recién completó un tercio del total de área sembrada (1 millón de hectáreas, con un rinde superior a 72 quintales por hectárea) y deja una producción parcial de 7,4 millones de toneladas, de acuerdo con el último reporte de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Además, el retraso en la recolección del maíz hizo caer a la mitad el arribo a los puertos de camiones cargados con el cereal para la exportación, explicó un reciente trabajo de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
“No existe antecedente en Argentina de tanta superficie de maíz permaneciendo sin cosechar para mediados de mayo”, remarcó en analista de la BCR, Guillermo Rossi, en el último informe semanal de la entidad.
Rossi recalca que es “magro el arribo de camiones con maíz a las playas de las terminales portuarias de la región durante los últimos días” y sita datos “del entregador Williams SA, en lo que va de mayo ningún registro diario hasta las 7 de la mañana supera las 1.000 unidades, mientras el ingreso acumulado en lo que va de 2014 frente al flujo de camiones durante el mismo período del año pasado es aproximadamente la mitad”.
El analista sostiene que “esa llegada demorada obliga a los compradores a mejorar fuertemente los precios ofrecidos para que los vendedores puedan asegurar la entrega a corto plazo”. El maíz disponible en Rosario cotizó el viernes a u$s 174 la tonelada, mientras para entrega más diferida los valores caen desde u$s 165 la toneladas en junio hasta u$s 155 por tonelada para agosto.
Según Rossi, los buenos precios de las posiciones cercanas responden a que la carga programada de maíz para el próximo mes en la región de Rosario “se ubica en unas 750.000 toneladas y compromete el stock de algunos exportadores”.
En esa línea, de acuerdo con datos de la Dirección de Mercados Agropecuarios del Ministerio de Agricultura, hasta el 7 de mayo último, la exportación había comprado poco menos de 8 millones de toneladas de maíz, eso es 46% menos que para la misma época del año pasado.
A valor FOB oficial actual (que fija el Ministerio de Agricultura), esas 7 millones de toneladas menos que se compraron de un año al otro para embarcar representan u$s 1540 millones.
Los datos oficiales también dan cuenta de que en el año comercial se llevan embarcados 2,5 millones de toneladas de maíz, contra 6,6 millones de igual lapso de 2013.
Paula López