Analistas opinan sobre la economía de Argentina luego que el Gobierno alcanzara la semana pasada un acuerdo con acreedores para reestructurar deuda soberana en moneda extranjera por unos 65.000 millones de dólares.
La tercera economía de América Latina, que transita una larga cuarentena en medio de una recesión y alta inflación, logró el acuerdo tras modificar algunas fechas de pago de los nuevos bonos sin cambiar el monto establecido para los pagos de capital o intereses.
Ahora el Gobierno argentino planea dirigir su atención a negociar un nuevo programa con su mayor acreedor, el Fondo Monetario Internacional (FMI), que aprobó en 2018 una línea de crédito stand-by por 57.000 millones de dólares.
"Argentina no logra superar la crisis sanitaria y el deterioro económico impacta en los indicadores sociales, dañando la confianza en el Gobierno. Los desafíos son grandes, pero una reestructuración exitosa parece una oportunidad ideal para relanzar la gestión con un programa de estabilización que genere un giro en las expectativas. ¿Podrá el Gobierno aprovecharla?", señaló en un informe el Grupo SBS.
"Dado el devenir de la actividad económica, el fuerte rebote generalizado de los activos financieros luce incongruente. Creemos que es justificado y con más camino por recorrer en algunos activos como commodities y determinadas acciones, no tanto en bonos", afirmó la consultora Delphos Investment.
"La realidad es cruda y muestra una sola verdad: la actual deuda de Argentina, con el actual tamaño de Estado argentino es impagable. Hay que reducir las dos cosas. Primero y antes que nada, hay que reducir el Estado, bajar el gasto y alcanzar superávit bajando impuestos y regulaciones, lo cual es difícil y nadie quiere hacer. Segundo, toda reestructuración de deuda sin quita de capital, está condenada a fracasar", señaló la consultora Economía & Regiones en un informe.
"Lo que no cabe duda es que la Argentina no es que necesita un plan alternativo, necesita repensarse. Esta Argentina que llegó hasta esta crisis no da más. No es que se arregla con una ley, con un artículo o corrigiendo solamente el gasto público, acá hay que repensar a la Argentina", dijo en declaraciones radiales José Ignacio de Mendiguren, presidente del banco BICE.
"Argentina con este modelo productivo lo único que va a seguir haciendo es ir de default en default, expulsando cada vez más gente a la pobreza y a la indigencia porque el modelo no cierra, es un modelo que le vende al mundo lo que vale poco, le compra al mundo lo que vale mucho", agregó.
"Se nota más movimiento y más liquidez en la calle. Esto podría aumentar la velocidad de circulación del dinero y propiciar un endurecimiento del proceso inflacionario, que estimamos que se estaría produciendo en estos momentos. Es que el estado general resulta delicado y requeriría un plan razonable y buena suerte para remontar la inflación, la desocupación y la caída de la economía, en momentos donde el financiamiento disponible resulta muy limitado", señaló la consultora VatNet Research.
* "Los operadores ya venían descontando el acuerdo con los acreedores externos que finalmente se confirmó, y por ello ahora esperan señales económicas para evaluar sus apuestas", dijo Gustavo Ber, economista de Estudio Ber.
"La cuarentena es un tema relevante desde lo económico y el día que termine o cuando volvamos un poco a la normalidad, hay un montón de temas a resolver que están debajo de la alfombra. La inflación es uno, hay una cantidad de pesos en circulación tanto en los bolsillos de la gente como las cuentas a la vista de los bancos y hay que ver cuanto de eso va a precios", dijo en declaraciones radiales Francisco Gismondi, director de la consultora Macroeconomía.
Reporte de Walter Bianchi Editado por Jorge Otaola- Reuters