"Cuando empecé a trabajar en el campo, le preguntaron a mi patrón: ¿qué hacemos, la ponemos de cocinera?, y él le contestó preguntale dónde está trabajando, si está en la cocina o está en el potrero. Y les dijo, ponela como peón, porque es peón", cuenta María Eugenia Bustos, peón rural de la estancia La Tranquila de la zona de Olavarría, donde nació y se crió.
En estos tiempos, en que las barreras de género comienzan a derrumbarse, María Eugenia es un claro ejemplo de cómo la mujer puede cumplir las mismas labores que el hombre, y, muchas veces, de forma más eficiente.
"Hace 11 años que mi patrón me puso en blanco y estoy trabajando en la estancia, pero siempre trabajó mi papá en ese campo y yo seguí su ejemplo. Siempre viví en la estancia, con mi papá, mi mamá y mi hermana, y ahí fui a la escuela que me quedaba a 15 kilómetros, también hice la secundaria y ahora estoy en la universidad estudiando para licenciada en administración", describió Bustos.
Paralelamente cumple con sus labores en el campo: "Hago las mismas tareas que cualquier peón masculino. Hago yerra, vacunadas, recorridas, pariciones, dar de comer a los animales, cambiarlos de potrero. En el tiempo de parición, con las vacas de primer servicio, me encargo yo, porque es un trabajo más delicado, y me encargo de asistir a esos animales primerizos, mis bombones, como les digo yo".
La diferencia de género asegura que no se nota en La Tranquila, "gracias a mi patrón, mi papá y mis compañeros. Si bien soy un poco la encargada de llevar adelante la estancia porque mi patrón está acá, en Buenos Aires, somos un equipo. Él me dice que busque gente o las tareas que hay que hacer, y el equipo lo formo yo, y es un equipo que me respeta y me cuida".
El campo en el que María Eugenia pone su impronta tiene cerca de 1500 hectáreas de producción mixta. "En la parte de ganadería lo hacemos todo con mi papá y otro peón", dijo. La familia Bustos tiene otra hija, que "también se crió en el campo, pero eligió tener un gabinete de belleza", señaló y agregó: "En cambio a mí siempre me gustó mucho la ganadería y mi patrón fue uno de los pilares para poder seguir y me dio un lugar que no cualquier patrón te ofrece, como ponerme en blanco, con una obra social y tener todo lo que la ley marca", contó.
El paso de María Eugenia por la Expo Rural tiene relación con su participación en Mujeres Rurales en Red, y en este sentido apuntó: "Lo importante es saber que las mujeres podemos hacer trabajos en el campo y hacerlos bien, igual o mejor que un hombre".