21 Ago 2012
La lluvia fue nuevamente el factor determinante para las operaciones en el Mercado de Liniers. El ingreso (que se esperaba que supere el volumen habitual) se vio directamente perjudicado por la imposibilidad de cargar debido al mal estado de los caminos.
Hubo una buena cantidad de compradores y hacienda que varió desde buenos lotes de feedlot hasta lotes regulares de novillitos con una terminación mejorable. Como era de esperarse, lo bueno se mantuvo y lo demás cayó. Los terneros y vacas (que conformaron casi un 60% del encierre) empataron las cotizaciones del viernes, mientras que los novillos perdieron casi un 5%.