7 Feb 2014
El presidente de la Federación que agrupa a la mayoría de los autoservicios que son propiedad de los residentes chinos en el país adelantó que decidieron no comprarle carne a los frigoríficos para obligarlos a que den marcha atrás con los aumentos en los precios de la carne, impuestos durante la semana.
El directivo explicó que "hasta el momento hay un total de 1121 autoservicios chinos de Capital Federal, Gran Buenos Aires y Rosario que decidieron sumarse a la propuesta de no comprar medias reses a los frigoríficos desde ayer y hasta el próximo martes puntualmente para que baje el precio de la carne", pero aclaró que "se trata sólo de las carnicerías administradas por los propietarios chinos y no de aquellas que fueron subalquiladas dentro de los locales comerciales".
También invitó a que se sumen a la iniciativa a todas las carnicerías y puntos de venta que comercialicen carne y le reclamó al Gobierno que "haga públicas a las empresas, comercios, industrias, intermediarios mayoristas, distribuidores, etc, que hayan sido denunciadas por haber aumentado excesivamente sus precios" y explicó que "los consumidores deben saber masivamente quiénes son los que se abusan para poder ejercer su derecho de no comprar".
Asimismo, Calvete dijo que la Federación apoya la iniciativa de boicotear también a los hipermercados y a las estaciones de servicio, en protesta por los incrementos en los precios. "Desde la Federación se apoya el boicot convocado para no comprar en hipermercados porque es un derecho del consumidor no adquirir artículos en aquellos puntos de venta en donde los productos hayan incrementado desmedidamente sus precios", dijo.
Calvete remarcó que no hay explicación de por qué el aumento del valor del dólar repercute directamente en los productos en góndola en un mismo porcentaje, "cuando los insumos no son iguales, siendo esta práctica algo inconcebible para el bolsillo del consumidor".