En medio de la escalada de los dólares paralelos, desde Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) respondieron a quienes acusan a los productores agropecuarios de retrasar la liquidación de divisas para especular con una suba del tipo de cambio oficial, con el cual reciben el pago de los granos, en pesos, por parte de los exportadores. "En los últimos días, la situación macroeconómica se sigue agravando.
La brecha cambiaria ha trepado en los últimos 45 días a 125%, y el tipo de cambio, CCL y el blue, han subido 45% (al momento que CRA emitió el informe), superando la cotización de $300 por dólar. Con esto se aceleran aún más los precios, elevando la expectativa de inflación al 90% anual. Ante esta coyuntura, derivada de la ineficacia de la política económica, se plantea en algunos trascendidos la necesidad de aumentar la oferta de divisas", analizó el comunicado de la entidad que integra la mesa de enlace junto a la Sociedad Rural Argentina (SRA), Federación Agraria Argentina (FAA) y Coninagro.
Sobre eso, los ruralistas agregaron: "Se comenta la supuesta retención de granos de soja por parte de los productores. Si bien trasciende que se estudiarían desde algunos ámbitos gubernamentales estímulos, transitorios que no sirven, para una mayor liquidación de granos, parece que no se entiende el problema de fondo".
"Ante todo, los productores actúan como cualquier ciudadano o empresario. Ante la creciente incertidumbre, ahorran, y su manera de ahorrar es escalonar la venta de granos de cada cosecha.
Esta actitud no sólo implica ahorrar, sino que es habitual, por un tema de distribución a lo largo de los meses de los ingresos destinados a consumo, no siendo especulación de ninguna manera", continuó el comunicado de la gremial que preside Jorge Chemes.
De acuerdo al responsable del Departamento Económico de CRA, Ernesto O´Connor, con buena parte del maíz vendido, aún quedan stocks de soja sin vender, relacionados con el argumento anterior. "La soja, cuyo precio internacional ha caído a valores similares a los previos a la invasión de Rusia a Ucrania, de alrededor de US$ 500 por tonelada. Similar situación ocurre con el trigo, que cotiza hoy a US$ 298 por tonelada. Lejos de la renta extraordinaria, y sin considerar subas de costos de fertilizantes y temor ante la escasez de estas importaciones, más la falta y el sobrecosto del precio del gasoil", describieron sobre las principales problemáticas que generan incertidumbre entre los productores.
También mencionaron que la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) estimó que la siembra de trigo, ya prácticamente terminada, es una de las más atrasadas de la última década, por falta de certidumbre ante la oferta y los precios de los fertilizantes, por la escasez de humedad en los suelos, y por la persistencia parcial de "la Niña".En este contexto, alertaron que la superficie del cereal podría caer entre un 25% y un 40% respecto a la campaña anterior. En cambio, la BCR afirma que, según el organismo brasileño CONAB, la producción de trigo de Brasil sería récord, de 9 millones de toneladas. "Distintas políticas, distintos incentivos", indicaron. "Ni renta extraordinaria, ni tipo de cambio adecuado, ni precios internacionales como en Brasil, Uruguay y Paraguay. Tampoco suba del precio de los alimentos liderando la suba del IPC (Índice de Precios al Consumidor), dado que es superada o compartida por muchos otros rubros. En cambio, brecha cambiaria récord, precio cobrado por el productor, en dólares de valor de mercado, del orden de 35% en soja y 48% en trigo", detallaron los ruralistas en una dura crítica a la política agropecuaria del oficialismo.
Por último, los ruralistas manifestaron: "¿Qué pasará con la siembra de gruesa de la próxima campaña, que es nada menos que la oferta de dólares de 2023? ¿Cómo generar más divisas? Con una política económica razonable, no con medidas aisladas. Con un urgente plan económico anti-inflacionario, que reduzca el déficit fiscal y la presión tributaria, y que permita que el sector productor trabaje y contrate más empleo".