Los incendios en Corrientes causaron hasta el momento pérdidas por $25.000 millones, de acuerdo con los cálculos reaizados por las entidades gremiales del campo. En este contexto, el Ministerio de Agricultura firmó un convenio de cooperación con aportes no reintegrables por $200 millones con productores de esa provincia y trabajan para agilizar la asistencia en las zonas afectadas.
Las entidades que componen la Mesa de Enlace relevaron el alcance de estos incendios, que se extienden en cinco provincias del litoral. En total, se encuentran afectadas unas 500.000 hectáreas y las producciones implicadas son la forestal, la ganadera, la de tabaco, la agricultura, la yerbatera, la citrícola y la algodonera.
En Corrientes, los incendios arrasaron cerca de 380.000 hectáreas agropecuarias, además de 20.000 hectáreas de bosques nativos incluidos y cerca de 10.000 hectáreas de bosques implantados.
En Misiones, la seca se sintió con fuerza en los últimos tres meses, sumado a un 2021 con el menor registro de lluvias de las últimas cinco décadas. En Entre Ríos, este escenario afectó al 90% de la superficie productiva, mientras que la falta de precipitaciones en Chaco y en Formosa impactó de lleno en la actividad ganadera y también en la agricultura, con rendimientos de granos gruesos que estarán por debajo de sus números habituales.
De acuerdo con el INTA, el área alcanzada por las llamas en Corrientes se incrementó más de seis veces entre enero y febrero.
"De no revertirse las tendencias meteorológicas actuales, el área quemada puede seguir incrementándose", señalaron. Según los técnicos de la entidad, las imágenes satelitales de la provincia revelaron que hay un incremento continuo de la superficie total afectada, que crece a razón de 20.000 hectáreas por día.
En este contexto, la Mesa de Enlace reclamó tanto a las autoridades nacionales como provinciales un apoyo impositivo y financiero que permita recuperar capital de trabajo, así como también impulsar la actividad productiva. En declaraciones radiales, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Jorge Chemes, advirtió sobre el impacto de los incendios en el entramado productivo argentino. "Hay una pérdida de recursos que va a pegar muy fuerte en todo el país", señaló.
La ley 26.509, de Emergencia Agropecuaria, contempla una serie de medidas para los productores.
En materia tributaria puede eximir total o parcialmente de los impuestos sobre los bienes personales y a la ganancia mínima presunta en explotaciones agropecuarias e inmuebles rurales arrendados,
respectivamente, ubicados dentro de la zona de desastre y afectados por esa situación. En tanto que para la actividad ganadera permite deducir el 100% del Impuesto a las Ganancias cuando se produzcan ventas forzosas de hacienda bovina, ovina, caprina y porcina.
