Uno de los principales mataderos de cerdos de Estados Unidos está funcionando más rápido que nunca debido a que los empacadores de carne se apresuran para mantener la carne de cerdo en las tiendas de comestibles durante la pandemia de COVID-19. El trabajador de la planta Héctor Ixquier dice que es hora de reducir la velocidad.
Ixquier dijo que buscó tratamiento médico en enero por los tendones que se lesionó en el brazo derecho mientras extraía sangre de cerdos en una planta de carne de cerdo de Seaboard Foods en Guymon, Oklahoma.
El inmigrante de 30 años de Guatemala dijo que solicitó un traslado a la posición de perforar las venas yugulares hace unos cinco meses, luego de que un aumento en la velocidad de matanza lo hiciera demasiado cansado para hacer su trabajo anterior: luchar con cadenas alrededor de las patas traseras de los cerdos antes de que lo hicieran. son matados.
Su nuevo trabajo también es agotador físicamente, y un médico recomendó descansar y evitar ciertas tareas en el trabajo, dijo Ixquier en una entrevista. "Estoy agradecido por la oportunidad", dijo sobre el nuevo concierto, "pero todavía es demasiado rápido".
Seaboard, el segundo mayor productor de cerdos de EE. UU. Después de Smithfield Foods, aceleró sus operaciones en Guymon el año pasado después de que el gobierno de EE. UU. Eliminó los límites a las velocidades de las líneas de producción de carne de cerdo a fines de 2019.Fue la primera planta en operar bajo la nueva regla, que estaba prevista para permitir que los procesadores produzcan carne más rápidamente.
Pero algunos trabajadores, como Ixquier, dicen que han sufrido físicamente como resultado. Seaboard ahora requiere que los empleados sacrifiquen entre 1.230 y 1.300 cerdos por hora, dijeron a Reuters dos trabajadores de la planta que también son delegados sindicales. Eso se compara con menos de 1,100 por hora en 2019, dijo uno de los trabajadores, José Quiñónez.
Los trabajadores y sus defensores dicen que el cambio de regla es parte de una serie de medidas finalizadas por la administración del ex presidente Donald Trump que ponen en peligro la seguridad de los empleados, incluida la exención de docenas de plantas avícolas de velocidades de línea más lentas y la reapertura de plantas que luchan contra COVID-19. Los cambios y la prevalencia de COVID-19 en los mataderos han hecho que sea más difícil mantener a los trabajadores en sus puestos de trabajo en un momento en que las empresas estadounidenses están tratando de acumular suministros de carne.
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Seaboard, que no respondió a las preguntas sobre Ixquier, dijo que la salud de los empleados es una prioridad absoluta. La compañía, una subsidiaria de Seaboard Corp con sede en Kansas, trabaja para mejorar los procesos y equipos y contrata empleados adicionales para ayudar a garantizar que la carga de cada trabajador sea manejable y segura, dijo el portavoz de Seaboard, David Eaheart.
Eaheart agregó que la regla que relaja los límites de velocidad de la línea de carne de cerdo mejora la capacidad de Seaboard para ajustar las operaciones según la demanda. Seaboard apunta a un promedio de 1.200 cerdos por hora en condiciones normales, pero ha ajustado las velocidades a medida que la pandemia ha reducido la dotación de personal, dijo. La compañía necesita examinar cómo funcionará la planta en condiciones distintas de COVID-19 para "comprender realmente" cómo el cambio afecta su negocio, dijo Eaheart.
Bajo la nueva regla, las plantas de cerdo pueden sacrificar tan rápido como quieran, siempre que eviten la contaminación fecal y minimicen las bacterias. Anteriormente, el límite impuesto por el gobierno era de 1106 cerdos por hora.
La administración del presidente Joe Biden, que se compromete a priorizar la seguridad de los trabajadores, retiró una propuesta de la era Trump para permitir que todas las plantas avícolas funcionen más rápido. Pero revertir la regla del cerdo sería más complicado, dijeron los abogados, porque ya está en vigor.
La eliminación en 2019 de las velocidades de las líneas de carne de cerdo por parte del Departamento de Agricultura de los EE. UU. (USDA) fue parte del Nuevo Sistema de Inspección porcina, que también permite que las plantas de carne de cerdo usen algunos inspectores de la compañía en lugar de los del USDA.
El USDA dijo que no está considerando una reversión de su eliminación de las velocidades de la línea de carne de cerdo. Pero dijo que la agencia está "examinando de cerca" cómo se desarrolló el nuevo sistema de inspección porcina.
La Casa Blanca no respondió a preguntas sobre velocidades de línea.
Los cierres de mataderos debido a los brotes de la primavera pasada, las exportaciones de carne de cerdo estadounidenses récord en 2020 y los consumidores que almacenan alimentos durante la pandemia han agotado los inventarios de los congeladores comerciales en todo Estados Unidos. Los inventarios totales de carne de cerdo de EE. UU. En almacenamiento en frío estaban en un mínimo de diez años y medio a fines de diciembre.
AUMENTO DE LESIONES
Guymon, una ciudad de aproximadamente 11.000 habitantes, está dominada por la planta de carne de cerdo Seaboard. En marzo pasado, se convirtió en el primer matadero en operar bajo la nueva regla, según documentos del USDA. Antes del cambio de la regla, otras seis plantas importantes de carne de cerdo de EE. UU. Habían superado los límites de velocidad de sacrificio anteriores con un permiso especial del USDA, según muestran los documentos de la agencia. El USDA dijo a Reuters que los mataderos habían demostrado que eran capaces de producir carne de cerdo segura mientras operaban a velocidades más rápidas.
Los planes de Seaboard para aumentar la velocidad de las líneas eran anteriores a la pandemia de coronavirus. Su decisión de seguir adelante coincidió con la propagación masiva de COVID-19 en los Estados Unidos. Cientos de los 2.700 empleados del matadero estaban infectados.
El portavoz de Seaboard, Eaheart, dijo que la compañía quería operar más rápido para reducir la cantidad de semanas laborales de seis días para los empleados y darles más descanso. Sin embargo, los niveles más bajos de personal debido a la pandemia obligaron a la empresa a reducir la velocidad de la línea y exigir que los empleados trabajaran los sábados, dijo.
El sindicato local United Food and Commercial Workers International que representa a los trabajadores de Guymon dijo que ha visto una correlación entre acelerar las líneas y más trabajadores que van a la estación de enfermería de la planta. Se negó a proporcionar cifras.
Los datos de la empresa muestran un aumento en las lesiones. La planta Seaboard en 2020 informó cinco laceraciones en el piso de sacrificio que requirieron tratamiento médico pagado fuera de la planta, como puntos de sutura, un máximo de tres años, según la compañía. Eso se compara con un reclamo de laceración en 2019, cero en 2018 y cinco en 2017.
La planta también experimentó un aumento en los cortes menos graves que no requirieron atención médica externa, dijo la compañía. El número de estos incidentes, que pueden incluir cortes menores tratados con vendajes adhesivos, aumentó a 19 el año pasado desde 10 en cada uno de los dos años anteriores.
Seaboard dice que su tasa general de lesiones está muy por debajo del estándar industrial de la Oficina de Estadísticas Laborales para el sacrificio y procesamiento de animales.
A nivel nacional, las inspecciones de incidentes graves en plantas de carne aumentaron el año pasado. La Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA) realizó 27 inspecciones en plantas de carne que no son de aves de corral en 2020 debido a una "fatalidad" o una "catástrofe", en comparación con una en 2017, tres en 2018 y cinco en 2019, según muestran los datos de OSHA .
El UFCW en 2019 presentó una demanda contra el USDA en un tribunal federal de Minnesota que busca revertir el cambio de la regla de velocidad del cerdo, alegando que no es seguro para los trabajadores. El USDA dijo en documentos judiciales que el sindicato no mostró un vínculo directo entre las presuntas lesiones de los trabajadores y el cambio de regla. La demanda está en curso.
