Los cultivos de invierno en Tucumán la vienen pasando muy mal. En un momento tan crítico, como el llenado de los granos, las lluvias siguen sin aparecer. Esto se suma a que durante el inicio de la siembra y los primeros estadios del cultivo las precipitaciones mostraron una gran irregularidad, y directamente se ausentaron durante el resto del ciclo.
Así lo destacó Oscar Nicéforo Vizgarra, coordinador del programa Legumbres Secas de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc). "Si consideramos que la superficie estimada ronda las 13 hectáreas de garbanzo, existe una importante cantidad de superficie muy afectada; incluso con lotes ya perdidos. Se estima que esta pérdida puede rondar entre un 12% y un 15%, o algo más; y el resto de la superficie seguramente tendrá una disminución importante de rendimiento", señaló.
Y añadió que se ven cultivos con muy poco desarrollo de plantas, que llegaron a final del ciclo con granos muy chicos. "No sólo la falta de lluvia afectó; también el fusarium. Y para completar apareció helicoverpa, que puede aumentar el daño; a raíz de ello es importante no descuidar el monitoreo de los lotes de garbanzo", aconsejó Vizgarra. Contó que la mosca barrenadora también afectó esta legumbre.
"Tuvo como hospedero la soja y el poroto, y ahora se las tomó con el garbanzo; podría ocasionar pérdidas de rendimiento de casi un 20%", advirtió. Contó que en Córdoba más de un 50% de los lotes presentan condiciones de regulares a malas, debido a la falta de agua, pero también al efecto de las heladas, que dañaron el cultivo. "Se reportó aborto de flores debido al frío, lo cual tendrá un impacto negativo en el rendimiento potencial del cultivo", avisó.
Dijo que en esa provincia se siguen reportando plantas dañadas por la mosca barrenadora del tallo (familia Agromizidae) en baja incidencia, pero alta severidad. "También se reportó Rhizoctonia sp. y Fusarium sp en baja a media incidencia", indicó. Y añadió que aparecieron los primeros reportes de isoca bolillera (Helicoverpa gelotopoeon), plaga que genera daño directo al consumir los granos dentro de la vaina.