Cadoppi explicó que, pese a los reclamos de las entidades que nuclean a los productores en el Delta, “Bordet y sus funcionarios visitaron la zona sin convocar a los verdaderos actores de esta tragedia. Valoramos la visita del mandatario, pero lamentamos que no se haya convocado a las organizaciones que nuclean a los productores. Sin embargo, creemos que a pesar de los más de cuatro metros de agua que cubren la mayor parte de Islas del Ibicuy, los gobiernos nacional y provincial no tienen verdadera consciencia de lo que está pasando. Da la impresión que ningún funcionario quiere reconocer que nuevas lluvias en las cuencas del Paraná y el Uruguay empeorarán la ya trágica situación del Delta”, advirtió a AIM.
Para Cadoppi, ni el Estado nacional ni el provincial quieren admitir lo que la Defensoría del Pueblo de la Nación o la justicia dicen sobre la verdadera situación del Delta “Nada se habla de las verdaderas causas de esta tragedia”, reflexionó.
Para el productor, “es más que evidente que la provincia tiene pocos recursos para el Delta y que la Nación está ejerciendo alguna influencia para que la catastrófica situación del humedal no se conozca en el resto del país. Es inentendible cómo no se hacen presentes las autoridades del gobierno nacional para comunicar a la comunidad isleña que los reclamos que les han presentado han sido aprobados y ejecutados”.
Cadoppi está enojado y no lo disimula: “¿cómo podemos aceptar que aún no se haya declarado la zona de desastre y que los productores de las distintas actividades tengamos que llenar formularios para ver si se nos reconoce en situación de emergencia o desastre? Tenemos más de cuatro metros de agua en nuestro Delta, catástrofe que se observa desde cualquier punto de la ruta nacional”.
Además, el licenciado se preguntó: “¿cómo puede ser que la flamante secretaria de Medio Ambiente de la provincia (Belén Esteves) siga hablando del Plan de Gestión para el Delta y no se haya comunicado con las entidades del humedal? ¿Cómo podemos aceptar que la nación aún no haya gestionado que las actividades de Islas no paguen Ganancias ni sus anticipos? ¿Cómo podemos aceptar que la nación no haya gestionado un tratamiento diferencial para el pago de cargas sociales de los trabajadores que las distintas actividades ocupan? Un campo inundado no produce, no puede pagar impuestos ni cargas sociales”.
Desentenderse de la inundación
Para Cadoppi, “con esta actitud de desentenderse de la realidad de la inundación en Islas, los funcionarios demuestran que no conocen ni les interesa la realidad del Delta; serán ellos los responsables de que en los próximos meses haya más empresas que se vayan del lugar e isleños que se muden a los cordones de miseria de las grandes ciudades. Si, ellos son los responsables del continuo desarraigo del Delta”.
El profesional recordó que ya hubo recambio de gobierno, pero advirtió que “la realidad parece la misma: el olvido del humedal. En el Delta ya estamos cansados de anuncios y promesas políticas que nunca se concretan. Hiere al isleño que le prometan créditos del Consejo Federal de Inversiones (CFI), y los hagan llenar formularios y formularios para que, al final de cuentas, las promesas caigan en saco roto… En el Delta, las comunidades y las actividades productivas necesitan el compromiso honesto y firme de los gobiernos. ¡Basta de promesas políticas!”, reclamó.
