Sólo las áreas montañosas cercanas a la cordillera, la costa bonaerense y el este del Uruguay registrarán temperaturas máximas inferiores a 30°C. Como es normal durante enero, la parte central del mes observará una pausa en las lluvias, que se extenderá a lo largo de dos a tres semanas.
El oeste del NOA, el centro y el norte del Paraguay, el norte de la Mesopotamia, la mayor parte de Cuyo, y el sur de la Región Pampeana observarán precipitaciones moderadas a abundantes, con focos de tormentas severas.
Contrariamente, el este del NOA, la Región del Chaco, el sur del Paraguay, la mayor parte de la Región Pampeana, la mayor parte de la Mesopotamia y la mayor parte del Uruguay registrarán precipitaciones escasas.
Hacia el final de la primera etapa de la perspectiva se producirá el paso de un frente de pampero, que provocará un moderado descenso térmico en la mayor parte del área agrícola.
La segunda etapa de la perspectiva comenzará con temperaturas algo por debajo de lo normal, debido a la entrada de vientos del sur durante los días precedentes. No obstante, los vientos del trópico retornarán rápidamente, causando el incremento de la temperatura.
La mayor parte del área agrícola observará temperaturas máximas superiores a 30°C, con amplias franjas con más de 35°C.
Sólo Buenos Aires y gran parte del Uruguay registrarán valores más moderados debido a la entrada de vientos marinos.
Las precipitaciones se concentrarán sobre el oeste del área agrícola, extendiéndose sobre el oeste del Paraguay, el oeste y el centro del NOA y parte de Cuyo.
Contrariamente, el este del NOA, la mayor parte del Paraguay, la Región del Chaco, la mayor parte de la Región Pampeana, la mayor parte de la Mesopotamia y el noroeste del Uruguay observarán precipitaciones escasas.
Sólo el extremo sudeste de Entre Ríos, la costa atlántica bonaerense y el sur y el nordeste del Uruguay registrarán precipitaciones moderadas con focos de valores abundantes, debido al ingreso de vientos provenientes del mar.
Eduardo Sierra