Las más importantes son:
- Un mejor desarrollo de las hembras de reposición gracias al rápido desarrollo ruminal.
- Un menor uso 4de leche de tanque que puede ser vendida a la usina o de sustituto lácteo (sólo 70 lts/ternero).
- Reducir la mortandad con terneras mejor alimentadas
- Simpleza de manejo.
En la búsqueda de estos objetivos, se sugieren algunas recomendaciones para poner en práctica en el sistema de crianza a estaca:
- Cuando los terneros llegan a la guachera debe chequearse su inmunidad, si han tomado suficiente calostro. Esto se hace con el test o prueba de glutaraldehido, que mide la inmunidad en anticuerpos del ternero. Además se deben pesar y controlar el ombligo (de posibles infecciones). En caso de llegar terneros con 48-72 hs de calostrado, este ya debiera haberse hecho al pie de la madre, utilizando yodo en solución al 10% y preferentemente con sistema teat-dip (sumergiendo el ombligo en la tacita), no con pulverizadores.
- Para ayudar al manejo de los terneros en la guachera, se los puede colocar en filas según van llegando, de manera que todos los de la primer semana de crianza se encuentran en una fila y los de la semana siguiente en la de al lado, y así sucesivamente.
- Resulta indispensable el buen trato de los animales. Del mismo modo que la limpieza de los utensillos a utilizar: baldes, tetinas, etc.
- Debemos respetar el horario de suministro de la leche AM/PM, cumpliéndolo con puntualidad.
- Durante las dos primeras semanas de crianza, se debe dar leche en 2 o 3 entregas diarias (siempre a la misma temperatura) y no es conveniente dar toda la leche en 1 sola toma durante este periodo, ya que el abomaso del ternero debe adaptarse progresivamente a la cantidad de leche a ingerir.
- A partir de los 15 días de crianza, se debe dar leche en 1 sola toma.
- El siguiente orden de calidad de leche a suministrar al ternero, va en sentido inverso a la gravedad de problemas que puede causar la dieta láctea usada: 1-leche de tanque, 2-sustituto lácteo con 100% de proteínas de origen lácteo, 3-calostro rebajado, 4-sustituto lácteo con 80% de proteínas de origen lácteo, 5-sustituto lácteo con 65% de proteínas de origen lácteo, 6-sustituto lácteo con 40% de proteínas de origen lácteo, 7-leche con antibióticos con/sin calostro mezclado, aunque esta última no debiera usarse en la crianza de terneros por la complicación a futuro que pudiera generar (y por la resistencia a los antibióticos).
- Aquellos terneros glotones, pueden sufrir trastornos de diarreas por ingerir demasiado en poco tiempo, y no pueden digerir la leche que toman; entonces a ellos se les puede dar la leche en 3 tomas.
Un resumen día a día de los puede ser el siguiente:
Días 1 al 14: en donde “lo importante es la leche” entregada en 2-3 tomas diarias, aunque poco a poco deben comenzar a comer Ruter y en cantidades crecientes pero sin esperar consumos elevados (no desesperarse); podemos utilizar como medida para estimular su consumo y desde el primer día, un puñadito de Ruter en la leche durante los primeros 3-4 días, como para enseñarle el sabor del alimento al ternero y que comerá cuando el sólido se acumula en el fondo del balde y al terminarse la leche. También se le puede abrir la boca y dárselo directamente, en pequeñas cantidades (solo aconsejable en aquellos que se niegan a probarlo). El consumo de agua (dulce y de buena calidad) es estimado en 2 lts/día. Es la semana más difícil para los terneros, ya que deben aprender a comer un alimento sólido.
Importante: no debemos tenerle miedo a los consumos bajos de los primeros días, ya que por el peso metabólico que tienen los terneros –y sobre todo si consumen el 3% de su peso vivo en materia seca- ya con la leche que toman, casi quedan satisfechos; además hay que tener en cuenta que vienen con el stress post parto.
Rutina de alimentación
- Por la mañana, preparar la leche, observando la temperatura que debe llegar al ternero con unos 37º; (si se prepara sustituto la temperatura del agua no debe superar los 42-45º, con calidad de agua apta para consumo humano, pues aguas salobres deprimen el consumo de leche y de alimento).
- Luego de dar la leche se coloca Ruter en cada comedero, en cantidad suficiente como para no repetir la maniobra hasta el día siguiente, o sea que el comedero siempre debe tener comida a disposición.
- Cuando se pasa a dar la leche de la tarde, se revisa si el ternero consumió algo y se saca la cuenta de lo que consume diariamente (se puede agregar algo de Ruter para que durante la noche o a la mañana siguiente, antes de la leche, no le falte).
- Si el ternero está en el día 6, y deja el comedero pelado, suministrar alimento hasta que le sobre algo de manera de adjudicarle lo que requiere (tal vez 400 gs).
Días 15 al 21: en estos días, se debe reducir la entrega de leche a solo 1 toma (observando con criterio que, si el ternero es de bajo peso o se encuentra debilitado debido a haber sufrido una diarrea -por ejemplo- y que denota mal estado corporal, esa disminución de 1 toma puede postergarse por unos días). Puede hacerse, entregando leche solo a la mañana o solo a la tarde o reduciendo 1 litro a la mañana y 1 litro a la tarde, para hacerlo paulatino. En esta semana, lo importante es el consumo de sólido, que debe alcanzar los 800 gs/animal/día hacia el final de la semana y es importante también controlar los consumos de agua, que van en aumento a la par del consumo del Ruter. El agua no debe faltar: 2 lts/día.
Importante: Es la semana más difícil para el guachero que recién se inicia en el sistema, porque debe interpretar que la alimentación que importa para el desarrollo del animal es la sólida y debe acostumbrarse a que con menos leche, el animal comerá más sólido. Además, la actitud del ternero cambia, se adapta al movimiento de la crianza, al personal, a los ruidos, a la rutina y en definitiva, esto se refleja en los consumos, que se sostienen y deben aumentar; es acá donde toma importancia el hecho del comedero lleno, con la medida calculada para el consumo diario (y no desbordante de alimento cuando en realidad consume 300 gs).
Días 22 al 28: ya deslechado, el ternero debe alcanzar el consumo de 1 kg de Ruter/día. Si se queda con hambre, entonces agregar balanceado acompañante de la mejor calidad posible, en cantidad creciente según el animal lo demande, aunque sin disminuir el kg diario de Ruter. Una vez alcanzado el kg de Ruter diario, agregar además 1 puñado de heno de buena calidad, para apoyar la funcionalidad del rumen en formación y verificar consumo de agua 4 a 6 lts/día. Lo importante es el consumo sostenido de varios días de 1 kg de Ruter.
Días 29 al 35: se sostienen los consumos de Ruter elevados de 1 kg diario, pero las cantidades de balanceado acompañante se van incrementando, hasta alcanzar 1 ½ kg. Debemos verificar consumos de heno y agua (6 a 8 lts/día).
Días 36 al 42: el consumo de Ruter va en disminución, mientras el de balanceado acompañante alcanza valores máximos. A medida que el operario adquiere experiencia en el manejo del sistema, logra reducir el consumo de Ruter en esta semana. Verificar consumos de heno y agua (6 a 8 lts/día).
Días 42 al 49: ya casi en etapa de recría 1, se recomienda mantener separados a aquellos que salen de crianza de los que ya se encuentran en recría 1, desde hace unos días, debido a posibles problemas de competencia por el alimento en los comederos. Para esto, lo mejor es que una vez logrado el desleche dejar las estacas, y pasar los terneros a pequeños piquetes, de manera de ir enseñándoles la competencia por la comida, lo cual también redunda en lograr mayores consumos individuales de alimento y luego mayores ganancias de peso.
Durante la siguiente etapa (preferentemente a corral), las terneras deberán lograr ganancias de peso de casi 1 kg/día, para llegar a los 8 meses con 240 kg de peso y 1 mt de alzada.
Ya en la recría 2 y sobre buenas pasturas, las ganancias de peso diarias tienden a ser más moderadas (0,750 kg/día) y en caso de no lograr dicha performance, se puede recurrir a la suplementación estratégica, buscando los casi 400 kg de peso y 1,20 mt de alzada, para el servicio de 15 meses.
Cuadro comparativo de costos (aproximados) entre dos sistemas de crianza (valores sin IVA).