La campaña 2023/24 proyecta un incremento del 70% en la producción de granos respecto al año pasado. Se espera un crecimiento de las exportaciones del 50% y un aporte positivo al PBI de casi 2 puntos. Sin embargo, los productores se muestran cautelosos debido a la incertidumbre política y económica.
"Es una campaña optimista porque es de recuperación frente a la seca que tuvimos el año anterior", sostuvo Costa y agregó: "Estamos proyectando 134 millones de toneladas cuando consideramos toda la producción de los seis granos principales".
Esto es un incremento de un 70% respecto a la campaña anterior que solamente cosecharon 80 millones de toneladas. "Ese número implica un montón de actividad adicional que se va a generar en toda nuestra economía que va a estar impactando positivamente en la actividad económica, estamos proyectando casi 2 puntos de aporte al PBI de manera positiva, es decir que la agroindustria va a ser un motor de crecimiento el próximo año", destacó el economista de la BCBA y detalló: "Estamos proyectando un crecimiento de las exportaciones del 50%, son 12.000 millones de dólares adicionales en un contexto cambiario muy complicado y, de mediar este tipo de impuestos que tenemos hoy, la recaudación tributaria también crecería por mayor actividad, mayor producción en un 50%, generándose 14 mil millones de dólares de pago de impuestos, saltando en casi 4.500 millones de dólares adicionales a las arcas fiscales de no modificarse los impuestos y de lograr estas cantidades producidas que estamos proyectando".
Por otro lado, haciendo referencia a las expectativas que tiene el productor agropecuario, el economista señaló que "tiene una visión cuidadosa respecto de cómo encarar la campaña, en nuestro relevamiento surge que la tecnología que estarían aplicando o no variaría respecto de los años anteriores o incluso se podría llegar a reducir un poco y quizás está muy influenciado por todos estos aspectos de incertidumbre que existen en la política de lo que se puede llegar a venir, incertidumbre respecto de las cuestiones económicas, el valor del dólar y la cuestión climática", y opinó que "la posición es un tanto defensiva a la expectativa de un cambio".
"Sabemos que el productor es muy competitivo y muy deseoso de aplicar tecnología, si la situación mejora un poco, podamos ver un cambio positivo", finalizó Costa.