La subsecretaria de Comercio Interior, Débora Giorgi, dejó su cargo después de 52 días de haber asumido en un contexto en el que el Gobierno busca doblegar la inflación mediante planes de congelamiento de precios.
Según confirmaron fuentes oficiales, la economista nunca fue designada en el puesto por decisión del presidente Alberto Fernández, quien no firmó el decreto.
Fuentes cercanas a Giorgi negaron diferencias con el secretario de Comercio, Roberto Feletti, y plantearon que "a 52 días de haber asumido, el decreto presidencial de su designación no fue firmado, entendemos que por presión del ministro (de Desarrollo Productivo, Matias) Kulfas".
Las presuntas diferencias con el titular de Desarrollo Productivo también se observaron entre Kulfas y Feletti, cuando el primero lo desautorizó recientemente sobre posibles retenciones a la carne. "Se conversó con Feletti, ya que estaba cansada y se acordó su alejamiento", reseñaron las fuentes, quienes destacaron la intención permanente de colaborar de la funcionaria en la lucha contra la inflación, que vuelve a estar en un primer plano ya que los acuerdos de precios no marcaron una desaceleración rotunda.
Sin embargo, otras fuentes del Gobierno señalaron que Giorgi "no fue designada por decisión del Presidente. No renunció porque nunca fue designada" y que es una determinación que había tomado Alberto Fernández.
En ese cargo, Giorgi trabajó bajo la órbita de Roberto Feletti, quien era el ministro de Hacienda, y lo acompañó a la Secretaría de Comercio Interior cuando el funcionario fue elegido para reemplazar a Paula Español.
Durante su corta permanencia en la secretaría, Giorgi fue clave en el control y seguimiento del congelamiento de precios impulsado por Feletti para más de 1.400 productos hasta fin de año.