Los precios del maíz cayeron ayer por quinta rueda consecutiva en la Bolsa de Chicago y acumularon una pérdida semanal superior al 4%, que los dejó en el nivel más bajo desde mediados de noviembre pasado. El buen clima previsto para las zonas agrícolas estadounidenses donde se está sembrando el cereal del ciclo 2015/2016 y las secuelas que dejaría el actual brote de fiebre aviar en los Estados Unidos fueron los principales fundamentos bajistas para el grano grueso.
Al cierre de los negocios, las pizarras de la plaza referente para las materias primas globales mostraron quitas de 2,46 y de 2,76 sobre los contratos mayo y julio del maíz, cuyos ajustes resultaron de 143,50 y de 145,56 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones retrocedieron un 4 y un 4,4% frente a los valores vigentes el viernes pasado, de 149,50 y de 152,26 dólares.
El contrato septiembre, que marca el inicio de la nueva cosecha de los Estados Unidos, perdió ayer US$ 2,66 y terminó la rueda con un valor de 148,61 dólares por tonelada. En la semana, esta posición resignó un 4,2% ante los 155,11 dólares del cierre del segmento anterior.
Los fondos de inversión especuladores fueron activos protagonistas en la tónica bajista del maíz, dado que durante la rueda liquidaron unos 12.000 contratos de maíz, equivalentes a poco más de 1,5 millones de toneladas. En todo el segmento comercial, estos "grandes jugadores" del mercado se desprendieron de 29.000 contratos, por un total de 3,68 millones de toneladas.
Entre los factores tenidos en cuenta por los operadores, el clima sobre el Medio Oeste estadounidense estuvo entre las prioridades. Y, en ese sentido, los reportes dejaron en claro que el fin de semana habilitará un rápido avance de la siembra de maíz. Tanto es así que desde el 9% relevado el lunes pasado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, el mercado está proyectando un progreso hasta el 24% de la superficie esperada. Además, en las últimas dos semanas mejoró -aunque levemente- la condición de los suelos en la zona núcleo, donde aún persiste déficit de humedad en el noroeste de la región.
El otro fundamento bajista para los precios del maíz y del combo poroto-harina de soja fue el brote de gripe aviar que se agrava en los Estados Unidos y que ya habría obligado a sacrificar cerca de 8 millones de aves, entre pollos, pavos y especies silvestres. Anteayer -luego del cierre del mercado-, el estado de Minnesota se declaró en "emergencia" y se sumó así a Wisconsin, que lo había hecho el lunes. En Iowa, el principal estado productor de huevos en el país, se detectó un foco en un establecimiento que cuenta con 3,8 millones de gallinas ponedoras, según informó la agencia Reuters.
Esta situación preocupa a los operadores, dado que la matanza de aves de corral y el potencial cierre de mercados para los productos avícolas estadounidenses podrían reducir la demanda de los forrajes necesarios para la formulación de las raciones. "Stocks enormes; cosechas récord. Ya contamos con demasiados fundamentos bajistas para los precios de los granos y ahora aparece esto que, si no se contiene a tiempo, puede golpear una de las pocas cosas que vienen bien: la demanda", dijo a LA NACION una fuente del sector comercial.
Las bajas externas tuvieron un fuerte impacto en el mercado doméstico. De los $ 1050/1070 pagados anteayer por los exportadores en las operaciones con entrega inmediata en la zona de Rosario, se pasó a un valor de $ 1020, según indicó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que relevó un volumen de ventas de 20.000 toneladas, por debajo de las 30.000 toneladas de la jornada precedente.
Las operaciones con entregas diferidas se hicieron a US$ 114 y a US$ 113 en la zona de Rosario y en Necochea, sin cambios, y a US$ 120 en Bahía Blanca, con una baja de 2 dólares. En el Mercado a Término de Buenos Aires, la posición julio perdió US$ 1,10 y cerró con un ajuste de US$ 115,51.
BAJAS AFUERA, VENTAS ADENTRO
La soja también se negoció en baja ayer en Chicago, donde los contratos mayo y julio cayeron US$ 3,13 y 3,40 al terminar la jornada con ajustes de 356,32 y de 356,69 dólares. Pese a estas pérdidas, el balance de la semana no arrojó cambios para las cotizaciones de la oleaginosa.
En el mercado doméstico, tras la "feria de ofertas" de anteayer, con valores que fueron de 1850 a 2000 pesos por tonelada de soja según el momento de entrega, las fábricas se limitaron a proponer $ 1850/1900 por mercadería disponible y $ 1900/1920 por grano para mayo. Sólo en casos puntuales; por lotes grandes y con descarga en junio la demanda habría convalidado $ 1950. Pero pese a la retracción de los valores, la BCR relevó ventas por unas 100.000 toneladas, igual que el jueves.
Acerca del trigo argentino, ayer la exportación pagó $ 950 por cereal condición cámara en San Martín, $ 50 más que anteayer. La mercadería con ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína se cotizó a US$ 135 en Punta Alvear y a $ 1388 en Bahía Blanca.
Dante Rofi
