La campaña de cosecha de maíz en Argentina está mostrando resultados excepcionales en los maíces tempranos, con rendimientos históricos superiores a 100 y 120 quintales por hectárea debido a un verano fresco y con buena humedad. Sin embargo, la situación es diferente para los maíces tardíos, afectados por la chicharrita del maíz. Chacra habló con el Presidente de Maizar, Federico Zerboni, sobre cómo afecta esta plaga a la producción de la gruesa. Además, señaló que las estimaciones sobre el alcance total de los daños aún están en curso, pero se espera que el impacto económico sea significativo y prolongado para los productores afectados.
"Es una campaña muy atípica, estamos en plena cosecha de maíces tempranos con rendimientos excelentes en casi toda la zona donde se sembró maíz temprano", sostuvo Zerboni y explicó que para ese tipo de cultivos un verano fresco, lo que provocó que el maíz se desarrollase muy bien, con buena humedad. Tienen rendimientos en toda la zona muy buenos, con picos históricos, rendimientos de más de 100 quintales, 120 quintales. "Esa parte de la cosecha de maíz viene muy bien, un poco complicada a veces por algunas lluvias, pero los maíces tempranos están en un año excepcional", explicó el titular de Maizar y agregó que la otra contraparte es el problema de los maíces tardíos o maíces en fecha que se sembró, cuanto más tarde más daño hay de esta plaga.
No es una plaga nueva para Argentina y para Brasil, en el norte se convivía con esta plaga hace varios años, en lugares se pudo controlar bien el manejo porque se la conocía y se sabía cómo manejarla, pero lamentablemente por una serie de circunstancias bajó a una zona de maíces templados que son los que tienen menos tolerancia a este insecto. "Agarró lo que es el norte de Córdoba, norte de Santa Fe, también un poco del sur de Santa Fe", contó Zerboni y explicó que en el norte, NOA y NEA causó mucho daño porque a muchos productores los agarró no estando preparados para combatirla, y estamos viviendo zonas que están muy afectadas con serios daños que todavía están en evaluación porque esos maíces todavía no completaron su ciclo".
Es importante aclarar que esta plaga no come maíz, esta plaga es una chicharrita que con la saliva inyecta dos bacterias y dos virus, que son los que provocan este achaparramiento o el cortado del llenado u otros síntomas que están provocando en el cultivo de maíz que le provocan, en algunos casos, la muerte total del cultivo.
Por otro lado, el titular de Maizar habló sobre el impacto que está teniendo en el bolsillo del productor. "A esos productores que les afecta todo el cultivo, el impacto es terrible porque después de tres años, un año que pintaba muy bien hasta el 15 de enero", sostuvo Zerboni y resaltó que "el productor trabaja a cielo abierto, depende de las lluvias, y tiene este tipo de problemas que aparecen para esos productores el impacto es terrible porque es otro año más sin producción de maíz".
Haciendo referencia a las estimaciones que está realizando las bolsas, el titular de Maizar consideró "prematuro porque este tema no se puede terminar de evaluar ahora, el proceso va a seguir en constante evolución" y dijo que los daños que hay "no son sólo de chicharritas, en ciertas zonas del centro de Buenos Aires, por fechas determinadas, los golpes de calor que hubo fin de enero/ principio de febrero también produjeron daños".