En 2013, el consumo de carne de cerdo creció un 20 por ciento (con respecto al año anterior) y se duplicó en la última década: pasó de 5,33 kilos por habitante por año a 10,40, según datos del Ministerio de Agricultura de la Nación.
De acuerdo con cifras de la Dirección de Porcinos, Aves de Granja y No Tradicionales del Minagri, el año pasado cerró con una disminución de las importaciones porcinas del 45%, que se suma a la de 2012 con un 40% menos. Esto indica que el cerdo nacional está cada vez más cerca de reemplazar al importado
La Argentina tiene los costos de producción más bajos de mundo, ya que posee granos en origen a un bajo costo, siendo el costo de alimentación el más importante en el sistema productivo, lo cual se traduce en rentabilidad.
Las estimaciones del grupo porcino de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA en Marcos Juárez (fundamentadas en las metas del PEA) indican que, para 2020, el consumo interno superaría los 16 kilos por persona por año, lo que permitiría aumentar la faena de cerdos a más de 8 millones de cabezas y la producción de cerdos a más de 700 mil toneladas.