La búsqueda de mayor capacidad de trabajo en la maquinaria agrícola alcanza a todos los rubros, hablamos en este caso de las pulverizadoras autopropulsadas. Resulta difícil aumentar el ancho de labor en los botalones clásicos por el peso que representa y su efecto sobre el chasis mismo de la máquina y la estabilidad del barral. Hay desarrollos, ya en nuestro mercado, de botalones construidos en fibra de carbono.
Se trata de un compuesto hecho a partir de una malla o tejido de hilos de carbono que aporta flexibilidad y resistencia más una resina termoestable que solidifica y une los hilos y permite repartir los esfuerzos en toda la estructura del material. Las fibras mencionadas son hilos muy delgados de entre 5 y 10 micras, cinco veces más delgado que un cabello humano.
Este material tan noble, aporta grandes ventajas en la construcción de botalones de pulverización, gracias a la combinación de las propiedades de cada uno de los componentes mencionados. Su bajo peso volumétrico permite construirlos de mayor tamaño sin sobrecargar la estructura de la máquina al tiempo de reducir la inestabilidad del mismo. Como puede verse en la tabla mas abajo, el acero templado pesa 7.87 kg cada litro, y la fibra de carbono 1.45 kg; más de cinco veces menos para el mismo volumen de material.
Se trata además, de un compuesto que no se corroe, la resina mencionada es de un material epoxi muy estable frente a ataques químico, por lo que no presenta riesgos de corrosión por efecto de los fitosanitarios.
Beneficios claros
Es factible reducir los costos operativos tanto de mantenimiento de la máquina como de consumo de combustible y disminuye además la compactación de los suelos, por el menor peso.
El aumento del ancho de labor en estas pulverizadoras redunda, claro está en una mejora sobre la capacidad de trabajo. Hay modelos disponibles de 45 m. Es justamente donde se puede mejorar la capacidad de trabajo, ya que la velocidad de avance depende, en general, de otros factores y no debe superar se el valor límite de cada operación.
Más tecnología
Los banderilleros satelitales ya están establecidos, no se requieren mayores detalles. Más aun resultan necesarios cuando se incrementa el ancho del botalón. También resulta de importancia el uso de corte automático por secciones, o mejor aún por pico, ya que no es factible saber a ciencia cierta desde la cabina cuando se está superponiendo una pasada con otra.
En la última Agritechnica en Alemania se presentó un equipamiento que permite ajustar el caudal de cada pico según el ángulo de giro de la máquina. Es sabido que cuando cualquier equipo gira, las ruedas internas recorren menor distancia que las externas. Mucho más diferente es el recorrido de los picos derechos (por ejemplo cuando la máquina gira a la derecha) que los metros recorridos por los picos izquierdos con un botalón de más de 30 ó 35 m de ancho de labor. La tecnología mencionada trabaja con la combinación de diferentes boquillas montadas en cada pico. De este modo puede ajustar el caudal sin alterar los parámetros de pulverización, como caudal de campo, tamaño de gota y DVM.