Un estudio realizado por el Espacio Multidisciplinario de Interacción Socioambiental (Emisa) de la Universidad Nacional de La Plata detectó que el cien por ciento de los algodones y gasas estériles contienen glifosato o su derivado Ampa. Los investigadores hallaron presencia del herbicida también en hisopos y en productos de higiene femenina, como toallitas y tampones.
Medardo Avila Vázquez, referente de la Red de Médicos de Pueblos Fumigados, destacó que las conclusiones del estudio se presentaron el sábado pasado en el cierre del 3º Congreso Nacional de Pueblos Fumigados. Dijo que "se encontró que todas las gasas de algodón daban positivo cuando tendrían que haber dado negativo" y describió: "Se buscó en tres farmacias distintas, distintas marcas y productos elaborados con fibra de algodón, y nos encontramos con esta situación que es preocupante, pero que era algo que iba a pasar".
El médico advirtió que hoy "el cien por ciento del algodón que se está cultivando en la Argentina es algodón de semilla de Monsanto, que es resistente al glifosato y recibe bastantes aplicaciones de glifosato cuando el capullo del algodón ya está abierto, expuesto al ambiente", y que "a ese capullo se lo cosecha y con esa fibra hacemos las gasas que usamos en los hospitales".
"Realmente nos preocupa mucho porque estamos usando ese algodón en carne viva, en heridas, cirugías o en terapia intensiva", destacó el médico, para quien de esta forma "estamos poniendo algo que les puede generar un daño y sabemos que va a ser muy complicado en la Argentina poder rápidamente fabricar insumos con algodón libre de glifosato, porque acá no lo hay".
En marzo de este año, la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (Iarc), dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), agregó a cinco pesticidas como cancerígenos "posibles" o "probables", entre ellos al glifosato.