A tres semanas del inicio del temporal que castigó al interior bonaerense, siguen inundados buena parte de los campos linderos a la cuenca del río Salado, que en las últimas horas volvió a desbordar agravando el panorama para los productores rurales de esa región.
Ayer, mientras desde el gobierno nacional se anunciaban beneficios fiscales y crediticios para la Provincia, desde Chascomús, Pila, Lezama y otros municipios castigados por el fenómeno climático los productores estimaban que las inundaciones tendrán un fuerte impacto en las cosechas y en la cría de ganado.
En Pila, uno de los distritos más extensos de la Provincia, la inundación todavía afectaba al 60 por ciento de sus 345 mil hectáreas productivas, según afirmó el vocal de la Sociedad Rural local, Hernán Figueroa.
“Todavía estamos complicados, ha habido mortandad de hacienda, su número se sabrá en la próxima vacunación del 15 de octubre al 15 de diciembre, ya que el 60 por ciento del distrito está con agua”, señaló Figueroa.
El directivo agregó que “en el caso de la agricultura, no hay nada de trigo y se va a hacer muy poca papa y en lo que hace a la cosecha gruesa, habrá campos sin sembrar: el primer factor es el económico, antes se sembraba y si se tenía que resembrar se hacía, pero hoy, no se puede hacer por los costos” que implica una cobertura de soja, ya que maíz directamente no se hace.
La inundación en Pila fue generada por la descarga del río Salado, que llevó el agua desde el noroeste bonaerense, y por el Canal 9, que trasladó una gran masa líquida de Azul, Olavarría y Tandil.
OBRAS
Al respecto, Figueroa señaló que “tenemos un grave problema, al Canal 9 le falta mantenimiento y ahí se abrió una brecha de 150 metros donde pasa el agua. Por ello, pedimos su reparación desde General Belgrano hasta su desembocadura, que no se toca desde 1909, cuando se construyó y hoy está muy mal”. Figueroa aseguró que “los terraplenes del Canal 9 están en muy malas condiciones: hace falta que sea ensanchado para que lleve más caudal, y otras obras para retener agua”.
AFECTACION
En tanto, desde la Sociedad Rural de Chascomús estimaron ayer que un tercio de los campos del distrito están todavía afectados por las inundaciones.
“Ha entrado mucha agua en los campos altos, lo que traerá dificultades en la siembra y en la cosecha gruesa de maíz, girasol y soja”, afirmó a este diario Alfredo Bigatti, productor y miembro de la entidad rural.
Bigatti aseguró que en las hectáreas linderas al Salado “el agua creció hasta más de dos metros”, por lo que dijo “el grado de afectación será grande”.
En la actividad ganadera, explicó, el agua llegó justo en la etapa de parición, generando un alto grado de mortandad de terneros. “Los números de las pérdidas recién van a poder estimarse el año próximo”, advirtió.
En ese marco, el productor afirmó además que en esa región están “a merced del clima”.
“Para que las aguas terminen de escurrirse necesitamos que no vuelva a llover al menos por 30 días”, dijo Bigatti.