El Servicio Meteorológico Nacional analizó la situación actual respecto a la bajante de los ríos en la cuenca del Paraná, como así también cuáles son las perspectivas para los próximos meses.
En este sentido, el informe detalló que el 75 % del área de la cuenca del Paraná está afectada por sequías moderadas a excepcionales, que equivale a 70 millones de hectáreas.
Vale señalar que esta situación crítica afecta la navegación fluvial, las tomas de agua urbana, la generación de energía, la fauna íctica, el riesgo de incendios y la modificación de cauces y paisaje. En tanto desde el SMN indicaron que las causas son varias como la falta de lluvias, el aumento de la demanda hídrica, la explotación de la tierra y sequía severa prolongada en el sur de Brasil, Argentina y Paraguay.
Con respecto a la cuenca del Plata, los informes arrojan que el 45 % se encuentra afectada por sequías extremas a excepcionales. Esta cuenca contempla una mayor superficie y ocupa la quinta parte de Sudamérica, abarcando territorios de cinco países
Por su parte, la cuenca del río Paraguay también tiene aproximadamente el 75% de su área afectada por alguna categoría de sequía. "El 62% de la superficie se ubica entre las categorías de sequía moderada a excepcional, lo que equivale a 68 millones de hectáreas", informaron desde el SMN.
En cuanto a cuándo se podría revertir esta situación, el pronóstico para agosto, septiembre y octubre indica mayor probabilidad de ocurrencia de precipitación inferior a la normal sobre el sur del Litoral (45%-50%) y este de la provincia de Buenos Aires (50%-55%).
Por su parte, para el oeste de la provincia de Buenos Aires, los datos revelan que la categoría normal se ve más favorecida (40%-45%). "En el resto de la región también se favorecen las precipitaciones inferiores a la normal, pero con menor probabilidad de ocurrencia (40%-45%)", detalló el SMN.
En base a estos parámetros, destacaron que, hasta enero de 2022, los pronósticos coinciden en mantener mayores probabilidades de ocurrencia de precipitaciones inferiores a lo normal en dichas zonas. Sin embargo, en la parte norte de la Cuenca del Plata, en la naciente del río Paraná alrededor de los 15°S, los modelos pronostican mayor probabilidad de ocurrencia de precipitaciones superiores a lo normal.
Por último, el informe detalló que la probabilidad de desarrollo de una nueva fase fría (La Niña) tiende a aumentar entre los meses de septiembre a enero 2022, su eventual desarrollo podría agravar aún más la situación. "Resulta fundamental el continuo monitoreo y actualización de este fenómeno y de sus pronósticos", concluyeron.