Pasadas las elecciones provinciales en esta importante región productiva del país, y producidos los cambios en sus tres administraciones de gobierno, el campo está ante una clara oportunidad de que se impulsen políticas activas coordinadas para desarrollar la producción.
Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos representan hoy el 24,1% del PBI de la Argentina, el 42,8% del total de la soja, el 41,3% del total del maíz, el 28% del total de faena bovina, el 72,6% del total de la producción nacional de leche, y estos indicadores podrían aumentar aún más si el sector agropecuario (en sinergia con otros actores económicos) pudiera contar con ciertos estímulos y quitas de distorsiones.
Sin dudas, la política nacional es, y podría llegar a ser, un condicionante importante para el presente y futuro de los productores de estas provincias. Las retenciones, el desdoblamiento cambiario, la discriminación en el otorgamiento de líneas crediticias, las intervenciones en los mercados, la excesiva burocracia, son sólo algunos capítulos que hicieron posible la fenomenal transferencia de recursos de las provincias al gobierno central y la carencia de dichos fondos para el desarrollo auténtico de esta región y su gente.
"Desde nuestra queremos realizar un aporte concreto y renovar la vocación de diálogo e intención de generar los espacios institucionales necesarios con los nuevos gobiernos provinciales para aportar iniciativas y propuestas que posibiliten el crecimiento de las actividades agropecuarias y sus cadenas de valor", sostuvo Juan Diego Etchevehere, director del Distrito Entre Ríos de la Sociedad Rural Argentina (SRA), y agregó que "en San Francisco, nos reunimos más de 35 Delegados Zonales y Directores de la SRA de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos para formar mesas de trabajo conjuntas relacionadas a la infraestructura, impuestos, energía, producción, ambiente, entre otras; como así también para promover un encuentro con los legisladores electos de estas tres provincias".