“¡Qué lástima que no traje la cámara!”, se lamenta una mujer cuando se da cuenta la escena que podría haber podido fotografiar. Dos terneritas de la raza Simmental, de 10 y 12 días, junto a sus mamás. Mientras la primera, Clarita, se esconde de la gente que se amontona tras las vallas, con su mamá, Farola, la más grande aprovecha que está suelta y corre de acá para allá.
“La gente viene todo el tiempo a verlas. Hay veces que nos vamos, porque ya nos cansa”, cuenta Esteban Piriz, cabañero de la Estancia La Pluma, de Santa Fe. Sin embargo, cada dos por tres, le acerca las nuevas estrellas del pabellón a los más chicos, para que las puedan acariciar.
Clarita, que pesa entre 35 y 40 kilos, nació solo un día antes de comenzar la exposición en La Rural. Y Porteña, que solo le lleva dos días, ya está pesando alrededor de 50 kilos. Si bien las dos terneritas se alimentan únicamente con leche materna, y lo harán hasta los ocho meses, aproximadamente, acá en La Rural se alimentan menos veces que en campo abierto, según cuentan sus cabañeros. “Acá maman tres veces, sólo cuando tienen hambre. En el campo, están todo el tiempo con las madres”, cuenta Piriz.
Sin conseguir la misma reacción por parte del público, hoy la mamá de Porteña, Ultranza, también tuvo motivos para ser el centro de atención: salió campeona hembra de la raza Simmental.
Con madres que tienen que desfilar todo el tiempo en la pista central, de las terneritas no podía esperarse otra cosa. “Ayer fue la primera vez que Clarita salió a la pista y no quería caminar. Recién caminó a la vuelta”, comenta Luis Alberto Basualdo, de la misma estancia. Ya aprenderá el oficio de su mamá.
Rural Palermo
Clarita y Porteña: atracción totalSe trata de dos terneritas que nacieron hace poco más de una semana y que se convirtieron en la visita obligada de los visitantes de La Rural
26 Jul 2012
26 Jul 2012