La Dirección General de Servicios Ganaderos envió ayer hacia Estados Unidos un documento de 400 páginas, traducido al inglés, con todos los datos requeridos sobre la puesta en marcha del compartimento ovino, sus garantías y otros datos que servirán para hacer el análisis de riesgo previo a la apertura del mercado.
El trabajo insumió varios meses y las autoridades del Departamento de Agricultura de Estados Unidos se comprometieron con el ministro Tabaré Aguerre, durante su visita a ese país, a que una vez recibida la información, se enviaría una misión técnica a Uruguay el mes que viene.
El compartimento ovino instalado por Uruguay en el Campo Experimental del Secretariado Uruguayo de la Lana “Dr. Alberto Gallinal” es único en el mundo, ofrece garantías científicas extras y busca destrabar el ingreso de carne ovina con hueso en Estados Unidos, Unión Europea y México. Esos son los tres mercados hacia los que apunta Uruguay en esta primera instancia.
Embarque.
Mientras tanto, los 1.480 corderos que conformaron la primera faena, desarrollada en Frigorífico San Jacinto que compró los animales, fueron acaparados por un importador ruso de gran potencial que abastece una línea de restaurantes de elite en las principales cadenas hoteleras rusas. Las primeras muestras de cortes con hueso están saliendo el próximo fin de semana, confirmaron fuentes de la empresa a El País. Es un firme cliente de Frigorífico San Jacinto, según supo El País, prácticamente todas las semanas está llevando un embarque con cortes de alta calidad.
A partir del compartimento, Uruguay comenzó a ofrecer al mundo carne ovina con hueso con trazabilidad, un producto de altísimo valor que permite comenzar el camino de la diferenciación y abre un promisorio futuro cuando Estados Unidos, México y la Unión Europea, comiencen a admitir los cortes con hueso generados a partir del compartimento ovino con el que Uruguay le mostró al mundo que se puede.
Hoy el gran problema es que estos primeros corderos faenados sólo tienen tres destinos para ser colocados cuando se trata de cortes con hueso: China, Brasil y Rusia. Al ser un producto diferenciado por su altísima calidad y porque el hecho de ofrecer garantías adicionales —como la trazabilidad individual y otros atributos— demandan costos extras, la mejor forma de valorizar esta tanda fue colocándola en Rusia. El importador ya estaba pidiendo cortes de esos corderos antes de que fueran faenados, pero hay otros interesados