El negocio ganadero cerró agosto con un mercado interno que si bien exhibe un leve incremento en sus números de faena, no logra repuntar en materia de consumo a nivel doméstico y un comercio exterior que si bien crecen en volumen, registra una caída en el valor de la tonelada exportada.
De acuerdo a la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra), la faena de agosto cerró en 1,19 millones de cabezas, cifra que representa un crecimiento del 1,3% en relación a julio, y del 4,2% en la comparación interanual.
Al tomar los primeros ocho meses del año, la faena fue de 9,16 millones de cabezas, un 2,5% más con respecto al mismo período de 2019. Traducido en carne, la industria procesó 2,07 millones de toneladas, que muestra un aumento de 2,8% en la comparativa interanual.
En este escenario, desde la entidad remarcaron que el consumo interno no logra levantar cabeza y sigue en los 50,3 kilos anuales por habitante, que en comparación a agosto 2019 permite visualizar que la caída es de 1,4 kilos de carne.
Un dato a tener en cuenta es que en julio las ventas de carne a China registraron su segundo mes de caída consecutiva, con un tonelaje que pasó de 52.600 a 35.500 toneladas. Este cambio en la tendencia del valor promedio pagado por China tiene su contraparte en la irrupción de un nuevo destino en las exportaciones.
Miguel Schiariti, presidente de la entidad, destacó que esta situación "llevó a la industria frigorífica argentina a reorientar sus ventas de cortes de vaca hacia Estados Unidos". De esta manera, el mercado norteamericano empezó a adquirir cierto grado de relevancia y si bien el volumen comercializado es solo una pequeña parte de lo exportado a China, no deja de ser una buena noticia para los exportadores.
Entre mayo y julio las ventas a ese destino experimentaron un salto notable y llegaron a representar un 10,6% de las ventas externas, con ingresos que pasaron de USD2,8 millones a USD261,1 millones durante ese período.
En julio, desde Ciccra calcularon que los ingresos totales en concepto de exportación de carne bovina fueron de USD226.1 millones, un 8,1% menos con respecto al año anterior. Desde el sector exportador también manifestaron su preocupación ante este escenario. Mario Ravettino, presidente del Consorcio Exportador ABC, señaló en declaraciones a Canal Rural: "la parte positiva es que exportamos volúmenes por encima de lo que estimábamos y la noticia negativa es que los precios han descendido sensiblemente". Para el directivo, esta situación se origina en factores como las devaluaciones de competidores como Brasil y Uruguay, además de las complicaciones causadas por la pandemia de coronavirus en países compradores, como el caso de China. En este punto, el titular de ABC advirtió que "hay que buscar competitividad por otros lados, como reintegros o diferenciación en los derechos de exportación en base al grado de industrialización".
Caen las importaciones
Es mayor el consumo de carne porcina .
En el primer semestre, la producción porcina llegó a las 316.000 toneladas, cifra que representa un incremento del 5,7% respecto de igual período de 2019, mientras que el volumen exportado creció un 55%, de acuerdo a la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES).
En materia de comercio exterior, el informe consigna que entre enero y junio se enviaron 18.000 toneladas, con una facturación superior a los USD26 millones.
En contrapartida, las importaciones de esta carne registraron una caída del 49,8%, con un ingreso de 9.734 toneladas.