Lionel Messi será consagrado seguramente hoy como el mejor jugador del mundo por quinta vez en su prolífica carrera cuando reciba el Balón de Oro durante la gala de premiación que la FIFA organiza anualmente en el Palacio de los Congresos de la ciudad de Zúrich, Suiza.
La sociedad futbolística mundial descuenta que el rosarino recuperará la estatuilla ganada los últimos dos años por el portugués Cristiano Ronaldo (Real Madrid), integrante de una terna que completa el brasileño Neymar, ladero del argentino en Barcelona.
La ceremonia comenzará a las 14.30 de la Argentina, después del protocolo que incluye una pequeña entrevista a cada aspirante vestido en ropa informal y luego el ingreso al recinto con vestimenta de etiqueta por la alfombra roja. Podrá verse en directo por ESPN, ESPN+, ESPN 2, Fox Sports 2, FIFA.com y FIFA TV a través de las redes sociales Facebook, Twitter, Instagram y You Tube.
Nadie duda que Messi se adueñará del galardón que ya obtuvo de manera consecutiva entre 2009 y 2012. Las encuestas, las apuestas, las especulaciones de la prensa internacional y hasta sus propios adversarios lo dan como ganador.
"La Pulga" tuvo un 2015 fantástico. A excepción de la Supercopa de España -perdida ante Athletic Bilbao-, lo ganó todo con Barcelona en un nivel individual superlativo, una vez más. Le bastaron diez meses del año para acumular méritos, pues dos los concedió por una lesión ligamentaria en la rodilla izquierda que sufrió a fines de septiembre. Coronó la Liga de España y la Copa del Rey en mayo y su cuarta Liga de Campeones de Europa en junio cuando experimentó su mejor momento del año. Después de la frustración en la Copa América en julio, se consoló con la Supercopa de Europa en agosto y logró en diciembre el Mundial de Clubes de la FIFA ante River en Japón.