Lluvias registradas durante los últimos siete días vuelven a generar excesos hídricos en amplios sectores de Buenos Aires, provincia que concentra más del 40 % de las 4.100.000 hectáreas implantadas a nivel nacional.
Si bien aún es temprano para evaluar la incidencia de este frente de tormenta, se podría descartar la posibilidad de registrar mermas significativas de lotes, dado que muchas de estas regiones ya habían sufrido recortes o impedimentos para la siembra luego de las inundaciones registradas en otoño e invierno.
No obstante, si podrían registrarse mermas sobre el potencial de rinde, como consecuencia al continuo lavado de nutrientes y un posible deterioro en la condición sanitaria de los cuadros, consecuencia de ambientes más húmedos durante las próximas semanas, e imposibilidad para transitar lotes y caminos rurales y poder realizar los controles sanitarios requeridos.
Por otra parte, sobre el extremo opuesto de la región agrícola avanzó la recolección de cuadros y ello permitió elevar la cosecha al 5,2 % del área apta, reflejando un avance intersemanal de 2,9 % y un adelanto interanual de 3,7 %. Luego de recolectarse poco más de 200 mil Ha, el rinde medio nacional se ubicó en 11,9 qq/Ha y permitió acumular una producción parcial de 250.000 toneladas. Bajo este escenario, mantenemos nuestra proyección nacional de producción en 11.500.000 toneladas para la campaña en curso.
La región NOA registró un importante avance de cosecha durante los últimos siete días, y el rinde medio ya se ubica por debajo de los 10 qq/Ha. Esto es consecuencia del prolongado déficit hídrico que afectó a la mayor parte de la región durante gran parte del ciclo del cultivo. Su vecina región NEA también registró un importante avance en la trilla y el rinde medio se ubicó en 11,9 qq/Ha.
En paralelo, desde nuestra anterior publicación también se relevaron cosechas sobre el Centro-Norte de Córdoba, región que aún mantiene una gran proporción de cuadros transitando etapas de llenado de grano, con deficiencias hídricas en amplios sectores. Hacia el Sur de Córdoba, más de la mitad de los cuadros también transitan etapas de llenado del grano, en algunos casos bajo regulares condiciones hídricas.
Sobre el Centro-Norte de Santa Fe también avanzó la recolección en lotes puntuales. El rinde medio regional se estima a la fecha en 25 qq/Ha, y es probable que durante los próximos días y si las condiciones climáticas lo permiten, la recolección cobre gran fluidez dado que una gran cantidad de lotes ya se encuentran en estado de madurez fisiológica. Hacia el sur, la región Núcleo Norte presenta una dispar condición de cultivo, y ello es debido a una heterogénea condición hídrica y sanitaria de los cuadros.
No obstante, la región mantiene expectativas de alcanzar un rinde medio superior a los 35 qq/Ha, por encima del promedio histórico de la zona. En cambio, sobre el Núcleo Sur las expectativas de rinde son aún más elevadas, superando los 38 qq/Ha. En ambos núcleos la mayor parte de los cuadros transita etapas de llenado del grano. Es importante remarcar que el norte bonaerense registró durante los días previos lluvias que superaron los 100 mm en varias localidades, alcanzando valores de hasta 140 mm en Bragado o 160 mm en Carmen de Areco, provocando excesos hídricos y anegamiento en lotes y caminos.
Si bien aún es prematuro evaluar el impacto sobre el cultivo, y a pesar de que varias localidades ya habían registrado excesos hídricos para la siembra durante otoño, es probable que durante los próximos días se comiencen a relevar pérdidas de lotes en ambientes bajos. Sobre el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, la mayor parte del área transita etapas de llenado de grano y una menor proporción de lotes aún se encuentra en floración.
Las expectativas de rinde varían de 33 a 37 qq/Ha, ello gracias a la buena oferta hídrica que acompañó al desarrollo del cultivo durante gran parte del ciclo. Hacia el Sudoeste de Buenos Aires-Sur de la Pampa también se registraron abundantes lluvias, con valores que promediaron entre 50 y 100 mm en gran parte de la región y picos superiores a los 150 mm en Dufaur y Bordenave.
En estas regiones, y luego de haber registrado significativa cantidad de lluvias en un período acotado de tiempo, se registrarían pérdidas importantes de lotes sólo en zonas puntuales, mientras que amplios sectores podrían recomponer rápidamente la condición hídrica de sus cuadros una vez estabilizadas las condiciones climáticas. En esta zona de gran importancia, el cultivo aún transita etapas de encañazón y espigazón.
Mismo estado fenológico se relevó en lotes sobre el Sudeste de Buenos Aires, en donde también se acumularon importantes volúmenes de agua, con la salvedad de que esta región ya había sido fuertemente afectada por excesos y anegamientos desde el período de siembra. Los registros hídricos más elevados de los días previos se ubicaron en Cnel. Pringles (>135 mm), San Cayetano (>140 mm), Tres Arroyos (>110 mm) y Necochea (>120 mm) entre otros.
Finalmente, según nuestro informe climático podrían registrarse heladas durante el inicio de la próxima semana, en amplios sectores del sur de Buenos Aires. Este sí es un factor significativo de riesgo en las zonas trigueras más importantes del país, dado que gran parte del área en estas regiones ya transita etapas de espigazón, altamente susceptible a las bajas temperaturas.
LA CEBADA ESPERA
A semanas de que se inicie la trilla de cebada sobre la franja central, el cultivo evoluciona en buenas condiciones. La adecuada disponibilidad hídrica con la cual transitó gran parte de su ciclo, hace que los cuadros hoy mantengan las expectativas de rinde por encima de los promedios históricos zonales.
De este modo, el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, zona que concentra el 8,2 % de las 920.000 hectáreas sembradas a nivel nacional, hoy transita llenado de grano en muy buenas condiciones. En esta zona el cultivo ha sido afectado por enfermedades como escaldadura de la hoja y mancha en red, las cuales fueron controladas oportunamente.
Del mismo modo, se registran ataques de pulgones y algunos eventos de oruga desgranadora. El objetivo de los productores zonales es obtener un cereal de calidad, por lo cual todavía están a la espera de un nuevo pulso hídrico y temperaturas moderadas, que permitan tener un buen llenado de grano.
Para la región Centro de Buenos Aires, el cultivo transita estadíos que van desde espigazón hasta inicios de llenado de grano, con expectativas de rinde moderadas. Las enfermedades de mayor relevancia en la región son mancha en red, mancha borrosa y escaldadura de la hoja. Como respuesta a estas enfermedades se han realizado aplicaciones, que en muchos casos ya han sido repetidas, buscando minimizar los daños sobre la productividad.
Otra zona de importancia para el cultivo, como es el Sudoeste de Buenos Aires y Sur de La Pampa, ha recibido nuevos eventos de precipitaciones durante los últimos días, los cuales en muchos casos llegaron a superar los 100 mm. En esta zona el cultivo transita el estadío de espigazón con muy buenas expectativas productivas. Hacia la vecina región del Sudeste de Buenos Aires, los cuadros se encuentran transitando estadíos de desarrollo similares, aunque con expectativas de rinde acotadas.
El desempeño regular del cultivo se encuentra relacionado con la falta de piso y caminos transitables, que imposibilitaron realizar labores de refertilización y control de enfermedades, en las fases iniciales del mismo.
Por último, cabe mencionar que para las regiones Centro, Sudeste y Sudoeste de Buenos Aires-Sur de La Pampa rige un alerta por entrada de aire frío que podría ocasionar heladas tardías. Considerando que el cultivo se encuentra ingresando a una etapa de susceptibilidad a bajas temperaturas, habrá que seguir de cerca el fenómeno, el cual podría generar un daño considerable sobre los rendimientos potenciales.