El Ejecutivo provincial se hizo eco de las advertencias del sector citrícola sobre una drástica reducción en la producción de limones este año, como consecuencia de las heladas y la sequía de 2013. El gobernador, José Alperovich, se reunió ayer con los referentes de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC) y, según el titular de la entidad, Roberto Sánchez Loria, hay un compromiso oficial para declarar la Emergencia Agropecuaria para la actividad.
El industrial expresó que los órganos técnicos de la provincia pudieron constatar que habrá una disminución del volumen de producción de cerca de un 50%, respecto de 2013, como consecuencia de las heladas de mitad del año pasado. Explicó que ese factor climático afectó la floración, que es lo que determina la cantidad de limones que producen las plantas, y que también hubo un impacto negativo a causa de la sequía, que impidió una rápida recuperación de los cultivos.
“Estamos hablando de una disminución en el volumen de producción de 700.000 toneladas en comparación con el 1,3 millón de toneladas del año pasado”, graficó.
Según Sánchez Loria, la declaración de la Emergencia permitiría aliviar la situación de la actividad “con algunas consideraciones en materia tributaria”, al tiempo que facilitaría las gestiones con la Nación para conseguir un reintegro del IVA y que se agilicen los reembolsos impositivos.
El titular de la ATC advirtió que debido a la baja en la producción, el período de cosecha del limón se acortará y eso impactará en la mano de obra. “Vamos a necesitar de esta herramienta (por la aplicación de la norma) para poder gestionar ante el Estado nacional algún tipo de ayuda o planes interzafra para los trabajadores, porque habrá menos horas laborales”, explicó.
Respecto de las exportaciones, Sánchez Loria sostuvo que “se tratará de cumplir con los compromisos internacionales asumidos hasta donde se pueda, porque esta es una situación de fuerza mayor”.
Alperovich expuso días atrás su preocupación por la situación del sector citrícola, especialmente, lo que podría ocurrir con las personas que se emplean en tiempo de cosecha. “Seguramente habrá menos gente trabajando porque la cosecha durará menos, a raíz de la baja producción.
La Comisión de Emergencia Agropecuaria, organismo provincial responsable de corroborar los daños en los cultivos para confirmar de manera técnica el estado de emergencia, debe elevar el pedido de declaración de Emergencia Agropecuaria al Poder Ejecutivo. Luego, el Gobierno puede instrumentar la medida mediante Decreto. Se supo que dos informes, elaborados por la Estación Experimental (Eeaoc) y el INTA, confirmarán la pérdida de un 50% en la “capacidad productiva” en el sector para la próxima campaña, dando las condiciones para declarar la norma.
Se trata de la Ley provincial 5.860 de Emergencia Agropecuaria, que establece una serie de beneficios, como las prórrogas en el pago de impuestos y obligaciones bancarias en los que tenga injerencia el Gobierno de Tucumán: el impuesto Inmobiliario; el pago del canon de riego, las obligaciones bancarias contraídas con la Caja Popular de Ahorros de Tucumán y el cobro de créditos a favor del Estado provincial.
La Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), seccional Tucumán, se encuentra en estado de alerta ante la posible afectación de las fuentes de empleo por la baja en la producción de limones prevista para este año. Además, el gremio decidió reclamar un incremento salarial del 40% en las próximas paritarias.
Ambos temas fueron ayer el eje de las discusiones durante un plenario de secretarios generales de toda la provincia, según confirmó a LA GACETA el delegado regional de Uatre, Ricardo Ferreyra. Sobre la disminución del 50% en la producción que estimaron el Gobierno y la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), el sindicalista adelantó que ayer solicitaron una audiencia con el gobernador José Alperovich y con el ministro de Desarrollo Productivo, Jorge Fejóo, a los fines de evaluar la situación. “Esperamos ser recibidos esta semana. Vamos a plantear que por más que sea declarada la emergencia, como gremio no vamos a aceptar que la gente se quede sin trabajo o sin ingresos. Si hay menos producción, que se trabajen menos horas pero que nadie quede afuera, y si se acorta el período de zafra a tres meses, que se otorgue alguna ayuda a los trabajadores durante los dos meses restantes”, explicó Ferreyra.
Por otro lado, el sindicalista confirmó que en el plenario se decidió hacer una presentación en el Ministerio de Trabajo para que se proceda a la apertura de las paritarias antes de fin de mes, a los fines de tratar el tema laboral y la actualización de los salarios. A propósito, indicó que Uatre “va a pedir un incremento salarial del 40%” por considerar que ese porcentaje se aproxima a la pérdida del poder adquisitivo a causa de la inflación.