Consideró, al hablar esta mañana en Casa de Gobierno, que "en este tema hay cosas complicadas; hay una situación muy particular que durante muchos años se ha estado trabajando sobre lo que hace a la genética y ese trabajo ha sido muy importante en cuanto al crecimiento de los rindes por hectáreas".
"En algún momento -agregó el funcionario- los productores de esas semillas han tomado decisiones unilaterales y han hecho firmar, sobre todo desde la producción y el acopio de las semillas, un contrato a los chacareros para tomarle el grano que ellos han cosechado, lo que significa pagarle 14 dólares por hectárea".
Fernández agregó: "Lo que hicimos nosotros desde el gobierno fue sentar a todos los sectores, desde los productores más chicos a los más grandes, para discutir este tema; no está bien que manu militari uno le imponga a un chacarero un contrato a firmar que ni siquiera están en condiciones de analizarlo porque debiera haberlo visto un abogado y saber en qué condiciones está, cuáles son las condiciones que se les exigen...".
"Lo que hicimos nosotros después de una cuarta reunión fue reunirnos nuevamente con todos ellos y propiciar un proyecto de ley de semillas, que no va a salir por decreto, lo más probable es que se termine mandando como una ley al Congreso para que se lo pueda debatir", explicó.
Y añadió: "Lo que busca es encontrar una salida para que no se le imponga con mano militari a los chacareros las cantidades y la producción que se fije y discutamos cuándo es que usted toma la semilla con esas características para su siembra, cuando usted cosecha y vende la semilla, el grano, en condición de commoditie, y cuando se queda usted con la semilla para su propia siembra y para su utilización futura". El objetivo "es atacar además lo que se conoce como la `bolsa blanca` que en definitiva no paga nada de estas cosas; queremos entonces llegar a un punto de equilibrio entre todos los sectores".
"Queremos llegar a un acuerdo vía equilibrio; vamos a llegar en algún momento, lo que pasa es que nunca nadie quiso ponerse a trabajar en defensa del chacarero porque terminaba siendo perjudicado y no estamos dispuestos a que sean las grandes empresas las que tomen decisiones de estas características que de alguna manera se lleva puesto a todo el mundo", completó.