Las aceitunas les han quitado el sueño a las autoridades locales, y no sólo por la peor merma histórica de producción que sufrirá el sector esta temporada, sino por culpa de una decisión ajena: el Gobierno de La Rioja dispuso nuevamente prohibir hasta fin de año la salida de aceitunas fuera de la provincia para que sean elaboradas en otras jurisdicciones, lo que amenaza la actividad de las industrias conserveras de San Juan, que casi sin materia prima contaban con la producción riojana para elaborar este año, según publicó el Diario de Cuyo.
La medida impacta en la fabricación de aceitunas en conservas, cuya producción sanjuanina es insuficiente para la capacidad de la industrial local. En San Juan existen 19 establecimientos dedicados a la elaboración conservera, según datos oficiales, y sólo en 4 que son socios de la Cámara Olivícola de San Juan peligran unos 200 puestos de trabajo esta temporada.
En años anteriores -2011 y 2012-, medidas similares del Gobierno riojano fueron revocadas por recursos de amparo individuales de las empresas, pero esta vez y ante una temporada muy deprimida, los empresarios sanjuaninos acudieron al Gobierno: a pedido de la Cámara Olivícola, las autoridades locales están realizando gestiones con las autoridades de La Rioja con la intención de revertir la decisión, o al menos buscar una salida para que no afecte a las fábricas de esta provincia. "Le hemos planteado el perjuicio para el sector industrial sanjuanino al secretario de Agricultura de La Rioja, Jorge Salomón; y el propio gobernador José Luis Gioja ya se comunicó con el gobernador Beder Herrera por el tema este fin de semana'', dijo ayer Leonardo Gioja, secretario de Política Económica del Ministerio de Producción local.
En una reunión realizada en ese ministerio el jueves pasado, los empresarios olivícolas pidieron ayuda oficial y entregaron una carta presentando la problemática dirigida al gobernador Gioja. "Tenemos esperanzas porque el decreto aún no ha sido publicado en el Boletín Oficial y la medida aún no está efectiva. Esta medida es arbitraria y perjudica no sólo a los productores de La Rioja, porque allá la industria es poca y monopólica, sino también a los industriales sanjuaninos, porque en un año como éste varios quedarían con la fábrica vacía. Por eso queremos anticiparnos a que suceda'', dijo ayer Esteban Durand, presidente de la Cámara Olivicola local.
En San Juan actualmente hay alrededor de 13.000 hectáreas en producción de olivos, de las cuales entre un 60% y un 70% son aceiteras y las utilizan unas 14 fábricas que hay instaladas. El 30% restante es ocupado por la industria conservera, que no alcanza a abastecerse con la producción local. "La producción de San Juan es más aceitera que conservera, y por lo tanto las industrias de conservas no se pueden abastecer ni en los años buenos de las aceitunas que produce San Juan; tienen capacidad de elaboración mayor que la producción primaria de aceitunas. Por eso, todos los años van a comprar a La Rioja en mayor o menor medida. Este año en mayor medida, porque acá en San Juan no tienen nada'', dijo Durand. En la entidad dijeron que las fábricas sanjuaninas compran cada año un 20% de la aceituna conservera que se produce en la provincia de La Rioja.