China comunicó a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) un caso de fiebre aftosa en un predio de ganado bovino ubicado al centro del país. La información se oficializó el pasado 1 de junio y se trata de 12 animales que ya fueron sacrificados.
El director de la consultora Tardáguila Agromercados, Rafael Tardáguila, dijo a Rurales El País que es fundamental ver el avance que pueda tener el tema en el país, por ejemplo, "saber si el predio afectado está o no alejado de otros establecimientos", ya que el virus "no se genera de forma espontánea" y "podría implicar otros brotes no informados hasta el momento".
A pesar que China no comercializa su producción bovina en el mercado internacional, el país asiático produce anualmente 7 millones de toneladas aproximadamente. "Si se desparrama el virus implicaría sacrificar una cantidad importante de bovinos y podría tener impacto en la oferta de carne para el mercado interno", añadió.
Fuente: Valor Agro