El Observatorio Vitivinícola Argentino, unidad ejecutora de la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) gestionada por la Bolsa de Comercio de Mendoza, dio a conocer datos sobre el comercio exterior de productos vitivinícolas, entre los que se destaca que la Argentina creció en sus exportaciones vitivinícolas U$S 168 millones entre 2009 y 2019, a partir de la diversificación de su oferta exportable.
En una evaluación de la cadena vitivinícola realizada de manera integral, el Observatorio busca encontrar oportunidades para los productos vitivinícolas y su expansión en el comercio internacional.
En 2009 la Argentina exportaba en total U$D 855 millones, los cuales se repartían mayoritariamente entre vino fraccionado y jugo de uva concentrado. A partir de dicho año, comenzó a verse un crecimiento sostenido en las exportaciones a partir de una diversificación de productos con nuevos protagonistas como el vino a granel, que creció un 24%, y, sobre todo, las pasas de uva, que tuvieron un crecimiento que llegó hasta el 127% en el acumulado de la última década.
Al cierre del 2019, las exportaciones llegaron a U$S1.023, con una especialización en vinos fraccionados (70% del total exportado), seguido del Jugo de Uva Concentrado (J.U.C) con el 14%. Aunque el crecimiento de las pasas de uva y el vino a granel ha sido importante en los últimos años, representando un 7% de las exportaciones cada uno, impulsados por la política de diversificación del sector.
Tomando el conjunto de las exportaciones de la cadena vitivinícola argentina, entre 2009 y 2019, los últimos diez años relevados, se logró crecer en un 19,7%. En facturación son U$S168 millones más en los últimos diez años.
El país es parte de un crecimiento mundial de las exportaciones vitivinícolas, en las que entre 2009 y 2019, el valor total comercializado se incrementó en U$S 13.383 millones, evolucionando desde U$S 33.455 a los U$S 46.838 registrados en 2019. El valor total aumentó un 40% en ese período.
La diversificación de productos es, sin lugar a dudas, una estrategia conveniente que están siguiendo todos los actores del negocio vitivinícola a nivel mundial. Países como Chile y España (principales competidores de la Argentina), han incrementado el valor de sus exportaciones de productos vitivinícolas siguiendo una estrategia de diversificación y superando los U$S3.000 millones en ventas al mercado internacional. Para el caso argentino, las exportaciones de uva en fresco cayeron un 85%. Este producto es el segundo en exportaciones a nivel mundial del sector, donde Australia (otro importante competidor) ha crecido un 169% en el periodo 2009-2019, por lo que en el mediano plazo es un desafío de la industria y una oportunidad para crecer.
"La vitivinicultura argentina tiene claras posibilidades de ganar espacio en esos mercados, dado que cuenta con los insumos necesarios para elaborar un buen producto. Basta con mirar hacia atrás y ver que las exportaciones de uva en fresco generaban una facturación del orden de los U$S 70 millones para el sector, allí tenemos mucho terreno para crecer", afirmó Daniel Rada, director del Observatorio Vitivinícola Argentino.
Las cadenas industriales de los principales países exportadores de productos vitivinícolas se han desarrollado a lo largo del tiempo con distintas estrategias. Lo claro es que la mayoría de ellos no sustentan la exportación en sólo un producto, sino que han crecido diversificando su oferta al mercado internacional. Es claro también que el principal producto en torno del cual se expandieron esas exportaciones es el vino, no obstante, resulta de interés analizar la composición de la oferta exportadora de algunos competidores de Argentina, con el objetivo de repensar el sector a largo plazo y enmarcarlo en el Plan Estratégico.
Accede al informe completo en: https://observatoriova.com/2020/04/la-importancia-de-la-diversificacion-de-productos-en-el-comercio-internacional/