Los valores en el Mercado de Liniers no se reflejan en una disminución de los precios de los cortes vacunos en las carnicerías, a causa del cobro de servicio de faena que los frigoríficos bonaerenses han implementado ante la falta de valor de cuero y la caída en el precio que reciben por las menudencias.
El otro factor que impide que la carne baje en los mostradores es que ante la caída en la demanda de los denominado cortes "parrilleros" (asado, matambre, vacío), los carniceros se ven obligados a venderlos más baratos y, para compensar, mantienen los valores de cortes con más salida, como paleta, carne picada y para milanesas.
Las última subas significativas de la hacienda en pie en el Mercado de Liniers se registraron entre el paro del campo, durante la segunda semana de marzo y el inicio del aislamiento obligatorio decretado por el Gobierno. En este período, la hacienda para consumo liviana marcó récords de $117 por kilo para novillitos de hasta 390 kilos y de $116 en vaquillonas de kilaje similar.
En los últimos días, en este mercado concentrador se oficializó la modalidad de ventas particulares y con una demanda más abastecida y un consumo en carnicerías más tranquilo, se registraron fuertes quebrantos en los valores de la hacienda liviana de consumo. En la última operatoria que se registró al cierre de esta edición, esas categorías cerraron con máximos de $102 y $94, respectivamente Según estimaron desde la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (Camya) y ante los problemas que se registran con cueros y menudencias, los frigoríficos cobran entre $6 y $10 en concepto de servicio de faena.
Como dato a tener en cuenta, este extra se implementó desde hace dos semanas, ante las dificultades de estas plantas para cubrir costos, al dejar de percibir ingresos por los cueros (que las curtiembres recepcionan, pero sin pagar por ellos) y el menor valor que reciben por las menudencias.
En plena suba de precios de la hacienda en pie, la entidad elaboró un informe en donde detallaron como se conforma el precio de la carne durante toda la cadena de comercialización y en base a un valor de $112 por kilo vivo, la media res en la carnicería debería bajar a $230,5 por kilo, incluido un costo adicional de $5 por pago de servicio de faena.
Frente a esta situación, las carnicerías no encuentran la manera de bajar sus precios sin afectar su rentabilidad y los supermercados aprovechan su mayor poder de compra para ofrecer cortes de carne vacuna a mejores precios. Según el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), los grandes puntos de venta disponen de mejores ofertas en comparación a las carnicerías durante marzo.
Tomando como ejemplo el asado, la brecha promedio es de $80 por kilo, mientras que en el caso de los cortes de rueda utilizados para la preparación de milanesas, la diferencia llega hasta los $57 por kilo.
Por Andres Lobato