La confianza de los productores agropecuarios en el desenvolvimiento de la economía y de sus empresas se derrumbó tras los resultados de las elecciones primarias que le dieron un amplio triunfo al candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández.
Así lo muestra el índice Ag Barometer, que elabora periódicamente el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.
La medición anterior, realizada en julio, había arrojado el máximo optimismo del sector, al menos desde que esta casa de altos estudios comenzó con los relevamientos, en octubre del año pasado.
En cambio, la encuesta formulada tras las Paso reveló un rotundo cambio de ánimo, sobre todo en las expectativas futuras, que se redujeron a su menor valor de la serie.
Números
En concreto, el índice de confianza general se redujo de 137 en julio a 74 en septiembre, el guarismo más bajo en un año.
En cuanto a los indicadores puntuales, el de "condiciones presentes" se redujo de 104 a 64 en dos meses. Pero el que se desplomó completamente fue el de "expectativas futuras", que incluye percepciones de cómo estará la producción y la economías en los próximos meses y en los próximos cinco años: bajó de su mejor nivel en julio (158) a su piso (80).
En valores reales, dos de cada tres productores piensan que los próximos 12 meses serán malos. En julio, eran sólo uno de cada cuatro.
En cuanto a la visión para los próximos cinco años, antes de las Paso sólo el 10 por ciento de los productores veía un futuro negativo. Ahora, esa proporción se elevó a la mitad.
Según Carlos Steiger, investigador de la Universidad Austral, manifestó: "Lo que llama mucho la atención, es el cambio en el índice de expectativas futuras. En septiembre, por primera vez desde que relevamos estos datos, quedó en territorio negativo, cuando previo a las Paso había alcanzado su mayor valor positivo".
Y agregó: "En todas las mediciones previas este índice venía mostrando resultados muy positivos, donde siempre las respuestas de orden positivo superaban a las negativas, e incluso la medición del mes de julio representaba el valor más alto de la serie".
Achique
Este cambio de ánimo impacta además en las decisiones de inversión. Un 74 por ciento de los productores, por ejemplo, no tienen previsto realizar inversiones en activos fijos a pesar de los mejores resultados que obtuvieron en un buen año desde lo productivo.
Asimismo, un 30 por ciento de los productores reconoció que cambió sus planes productivos después de las elecciones de agosto. Dentro de este grupo, el 72 por ciento dijo que sembrará menos maíz y el 30 por ciento reducirá sus gastos, aplicando menos tecnología.
Fuente: Valor Soja