En el XXVII Congreso de Aapresid "30: 10000 ConCiencia Suelo", el ingeniero Lucas Borrás de la facultad de Ciencias agrarias UNR y CONICET, habló acerca de la importancia de una buena implementación del cultivo, los aspectos determinantes de rendimiento en zona núcleo y por último del manejo y calidad de los granos cosechados.
Su disertación llevó por título "Brechas de producción en soja: enfoques del cultivo y el sistema". comenzó informando que con Syngenta ,realizó un proyecto de varios años y siempre encontró que la calidad de implantación impacta en el rinde en forma directa. Por lo tanto, instó a los productores que lo consideren como un punto de importancia que requiere la misma atención que genera el maíz en esa etapa.
"La siembra es un momento crítico, y lo que hacemos nos condiciona el futuro del lote", remarcó el especialista, quien procedió a brindar recomendaciones para ser más eficiente y disminuir pérdidas. Las mismas consisten en los siguientes aspectos: densidad, variabilidad temporal y espacial de las plantas en el canopeo, y el espaciamiento. "Cuando nos pasamos mucho en plantas por hectárea, empezamos a perder rindes en grupos cortos y largos", sostuvo Borrás.
A continuación, las claves que brindó el especialista para el manejo de densidad de soja
- Para grupos cortos sembrados temprano: 10-20 pl/m2
- Para grupos cortos sembrados tardíamente: 30-40 pl/m2
- Para grupos medios/largos sembrados temprano: 10 pl/m2
- Para grupos medios/largos sembrados tardíamente: 10-20 pl/m2
- Efectos negativos observados en siembras tempranas con densidades altas
Otro tema importante a tener en cuenta, es la desuniformidad de la implantación "perdemos rindes por mala distribución tanto temporal como espacial" enfatizó Borrás y aclaró que "aumentar la densidad no nos salva del problema cuando hay desuniformidad".
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Más en detalle, indicó que "el efecto negativo de la desuniformidad espacial fue menos frecuente que el efecto de la desuniformidad temporal en grupos cortos", y agregó que la desuniformidad temporal redujo el rinde en fechas tardías como tempranas, independientemente del grupo del madurez y también, los efectos de la desuniformidad fueron independientes de la densidad.
Los cuatro factores que explica la variabilidad en el rendimiento
El experto, en línea con lo anterior, divulgó a la audiencia los principales aspectos a tener en cuenta para maximizar los beneficios en los campos argentinos y acortar la brecha.
- Fecha de siembra: recomienda en base a su investigación, una fecha de siembra óptima hasta el 17 de Octubre. Luego, "las perdidas de rendimiento son en promedio de -35 kg/día".
- Precipitaciones: asegura que tiene un efecto diferente dependiendo de la presencia de la napa. Si hay napa, el efecto es positivo o nulo de -1 kg/mm. En cambio si no hay napa cercana, el efecto es positivo con 6kg/mm. "Las precipitaciones interaccionan muy fuerte con la napa y ésta depende del tipo de suelo".
- Tipo de suelo: en argiudoles el efecto es positivo de 276 kg/ha, mientras que en hapludoles el efecto es positivo con 1708 kg/ha.
- Genotipo: el efecto del genotipo tiene una diferencia de alrededor de 400 kg/ha, según el genotipo más antiguo y el más moderno. "Hay que destacar que el genotipo explica un 70% en la variación del rendimiento y el manejo explica un 30% más de las variables ambientales".
En conclusión, el ingeniero Borrás finalizó su exposición con los siguientes comentarios finales: "En principio hay que prestarle atención a la calidad de implantación de nuestros lotes en soja, saber también que una mala distribución nos determina perdidas de rendimiento y que las variables de manejo nos permiten explicar mejor las diferencias en % de proteína entre lotes que las ambientales".
