En una fuerte apuesta por las energías limpias y el autoabastecimiento energético de la provincia, Mendoza pone en marcha cuatro nuevas centrales hidroeléctricas. Las mismas están en su etapa final de montaje, y son parte del Plan de Energías Renovables Argentina, que la provincia cumplirá en su totalidad con 6 nuevas centrales, que serán capaces de abastecer entre 25 y 30 mil hogares y reducirán 30 mil toneladas del dióxido de carbono que se generaría con centrales térmicas.
Para llevar a cabo el desarrollo de las obras, privados se hacen cargo con costo cero para la provincia, a cambio de la concesión por 10 años de obras que duran por lo menos un siglo y que vencido ese plazo quedarán para el Estado.
"El trabajo coordinado entre Emesa y la empresa CEOSA con el Departamento General de Irrigación para poder ejecutar las obras ha sido clave para lograr el avance obtenido. Hace cinco décadas que se intenta aprovechar el potencial eléctrico del sistema de riego y finalmente hoy, lo estamos logrando", aseguró Martín Kerchner, ministro de Economía, Infraestructura y Energía.
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Las primeras cuatro centrales que comenzarán a trabajar son Dique Tiburcio Benegas, en el departamento de Rivadavia, y Triple Salto Unificado, en el departamento de Junín; además de los Saltos 6 y 8, sobre el tramo del canal Cacique Guaymallén en Luján de Cuyo.
Antes de fin de año estarán listos y generando energía el salto 7 del canal Cacique Guaymallén, en Lulunta, Maipú y el salto Las Tunas, sobre el arroyo del mismo nombre en el departamento de Tupungato.
