La AFIP buscará reducir el empleo informal con un operativo centrado en los sectores del comercio, el agro y la construcción en donde presume que existen nichos de irregularidad laboral. El anuncio se conoció en el medio del aumento del desempleo en distintos rubros, con la presunción del crecimiento del trabajo no registrado, y cuenta con el respaldo de las cámaras empresariales por la "inequidad" en el sistema de aportes.
A través de una comunicación oficial, los sabuesos anunciaron el envío de "unas 120.000 inducciones electrónicas a contribuyentes que presuntamente no declararon a la totalidad de sus empleados" que "en los próximos días, los empleadores encontrarán la comunicación de AFIP en la ventanilla electrónica".
Entre los principales rubros que serán notificados se encuentran los relacionados con la actividad rural, restaurantes, elaboración y venta de productos de panadería, elaboración de pastas frescas, fábrica de muebles de cocina y oficina, confiterías, geriátricos, lavaderos industriales y construcción, entre otros. "De las actividades mencionadas, se destacan los restaurantes con 28.000 contribuyentes, las relacionadas a la industria panadera, con 26.000, las actividades rurales con cerca de 25.000 y 2.500 de fábricas de pastas frescas, entre otros", señaló la AFIP en un comunicado de prensa.
"Cualquier momento es bueno para avanzar sobre la formalización porque la Argentina tiene un gigantesco porcentaje de la población en la informalidad. Todo lo que se pueda hacer en ese sentido lo apoyamos firmemente", afirmó el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Gustavo Weiss.
Por su parte, el secretario de la Cámara de Comercio, Mario Grinman, se lamentó de los niveles de informalidad laboral "que rondan el 38% en la Argentina" y dijo que "en algún momento se deben tomar decisiones para comenzar un camino hacia la normalidad".
"Pero también es cierto que hay una enorme presión fiscal y, por lo tanto, el premio a evadir tanto en cargas patronales es muy tentador", admitió el referente de la CAC, que pidió que los estados nacional, provinciales y municipales hagan su esfuerzo para que no quede sólo en el sector privado.
En territorio bonaerense, ARBA puso la lupa en 900 carnicerías de las cuales 303 estaba en condiciones de irregularidad. "Con estas acciones de fiscalización buscamos profundizar las medidas que venimos implementando desde el año pasado para regularizar los distintos eslabones de la cadena de producción y comercialización de carne", dijo el director del organismo, Gastón Fossati.
Ariel Maciel