La Cámara Argentina del Maní (CAM) publicó una nueva estimación de producción, oferta y demanda para el ciclo 2017/18, con números que constituyen una nueva muestra del sensible impacto que la sequía tuvo sobre este cultivo.
La Bolsa de Cereales de Córdoba advirtió recientemente que es el grano más perjudicado por la falta de lluvias y un informe especial realizado por Agrovoz, durante el 8° Circuito del Maní, reveló los problemas de cantidad y calidad que está mostrando la cosecha.
Números
El informe de la CAM, elaborado con datos aportados por la industria hasta el 31 de marzo, advierte que "la aguda sequía sufrida por la zona núcleo durante el ciclo 2017/18 ha afectado significativamente los rindes estimados, marcando una disminución de la producción de maní en grano que se espera ronde el 21 por ciento respecto de la cosecha inmediata anterior".
A valores reales, se espera una producción en grano de alrededor de un millón de toneladas, cuando hace un año fueron 1,2 millones.
Si bien este año no hubo pérdida de superficie sembrada como sí hubo en 2016/17 por inundaciones, la falta de agua derrumbó los rindes, de un promedio de 21,8 quintales por hectárea el año pasado a 16,3 quintales que se aguardan en el corriente ejercicio.
De esta manera, el saldo disponible para exportar se reducirá de 541.321 toneladas a 400.913; es decir, un 26 por ciento. El presidente de la Bolsa de Cereales de Córdoba e integrante de la Cámara del Maní, Luis Macario, estimó que esto significa una pérdida para la industria de entre 270 y 300 millones de dólares.