El clima excepcionalmente caluroso y seco ha causado un estrés considerable al ganado lechero y los cultivos en las áreas más adecuadas para la producción de leche en Argentina, Uruguay y Brasil. Los volúmenes de leche producidos han disminuido en consecuencia, así como el contenido de grasa y proteína en la leche.
La disponibilidad de leche en Argentina y Uruguay sigue siendo adecuada para cubrir la demanda de las empresas procesadoras, pero el suministro de crema es muy limitado.
Las entregas de leche en Uruguay en diciembre de 2017 aumentaron un 2,8% en comparación con diciembre de 2018. Un total de 1.905,6 millones de litros se entregaron en 2017, un aumento de + 7,36% en comparación con 2016.
La oferta de leche y crema en Brasil no es suficiente para satisfacer la fuerte demanda interna. Las escuelas reanudan la compra de leche embotellada después de las vacaciones de verano, y la demanda de leche en polvo de la industria alimentaria es buena.
Los precios de exportación de leches en polvo entera y descremada se han incrementado moderadamente en América del Sur, en línea con las últimas subastas de GDT. La falta de crema en el mercado favorece el aumento en el valor de LPE en la región, y algunas empresas de procesamiento prefieren producir LPE en lugar de LPD. El menor suministro de leche causa menos disponibilidad de leches en polvo en el mercado.
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