La mesa de Contractualización Frutícola, consideró el lunes de la semana pasada aspectos como tratamientos sanitarios, fertilización, poda, raleo, defensa de heladas, combustible, costo laboral, y en ese marco definió en "34 centavos de dólar el costo de referencia de la producción de kilo de pera y manzana de la temporada 2016/2017", según se informó.
El titular de la Federación frutícola, explicó hoy a Télam que los costos para levantar la cosecha "son valores que se transfieren entre otras cosas a la mano de obra, al combustible, al transporte. Lo que se está buscando es paliar una situación complicada y que el productor no malvenda la fruta: Por eso requerimos estos fondos".
También dijo que más allá de que subió un poco el dólar, "no avizoramos que el esquema haya cambiado con respecto al año pasado", y afirmó que durante los últimos dos años no pudieron bajar los costos, lo que generó que hoy se encuentren casi en la misma situación, "pero con el agravante de un aumento en los costos de un 20% más", remarcó.
Por su parte, el gobernador Alberto Weretilneck, manifestó a mediados de enero que todos aguardan "que haya poca fruta en los países competidores y algún que otro problema en Europa y otros lugares, para que nos permita que nuestra fruta, a pesar de ser cara, puede ser vendida".
Al repasar cifras críticas para la actividad, resaltó "la pérdida de más de 10 mil hectáreas en producción y la desaparición de 2 millones de jornales en los últimos 5 años".
"En su momento propusimos el Libro Blanco, algunos están de acuerdo y otros no. Pero a nosotros nos interesa que todos asumamos que necesitamos un gran consenso, un plan frutícola nuevo. Si lo hace el gobierno nacional, que lo haga, si lo hace la provincia, los productores o la CAFI sola, bienvenido sea", agregó el mandatario provincial.
La Federación realizó en enero del año pasado un pedido económico al Estado Nacional de $2,00 pesos por kilo de fruta, "porque íbamos a perder en promedio $3,00 y el mismo monto se vio como ingreso en la exportación, que tiene un costo de movimiento de 11 dólares por bulto", añadió Hernández.
En ese sentido sostuvo que "si nuestros competidores venden a 15 dólares, tenemos que salir a vender a 14, sólo quedan 3 dólares por bulto y si cada dólar cuesta 20 pesos, estamos hablando de 3 pesos por kilo al productor, o sea $60 la caja de 20 kilos".
Asimismo dijo que con el dólar del año pasado a $17, "al productor le quedó un ingreso mucho menor, para subsistir el resto del año".
Un respiro para esta actividad, "sería que el Estado defina políticas para bajar los costos, pero eso no se ve, por el contrario es lo que se ve son incrementos tanto a nivel provincial como en el nacional".
De ese modo sostuvo que "no existen reglas claras que indiquen por ejemplo que a los ingresos brutos los pague el que comercializa y no el productor primario".
"Creemos que este camino es lo más rápido para sostener la producción frutícola porque si no se vende la fruta bien, será imposible pagar los 540 millones en créditos que se nos brindó desde el Estado el año pasado", advirtió Hernández.
Finalmente señaló que el valor global requerido fue estimado y promediado en $600 millones, a 30.000 kilos por hectárea que es lo que se necesitaría; de todas maneras hay que ver que esto después queda en una solicitud de adhesión para el productor, porque se realizan relevamientos de trabajos, y de cosecha con todas las tareas que se deben realizar para lograr la mejor calidad en la fruta.
Ante las novedades, favorables o negativas, "se llamará a una asamblea de productores para definir las acciones a seguir" afirmó y agregó que "si no existen cambios en la situación, los productores se definirán, pero hasta ahora no tuvimos que realizar ningún reclamo porque existieron respuestas".
