l año 2017 terminó con una muy buena noticia para los arandaneros. El Gobierno nacional logró la apertura del mercado chino para los arándanos argentinos, una fruta que en Entre Ríos tiene un desarrollo importante y, sobre todo, un potencial enorme. Esta medida de Beijing abre expectativas muy favorables para los productores que poseen sus plantaciones en la provincia, especialmente en el departamento Concordia.
El Ministerio de Agroindustria de la Nación informó en los últimos días de 2017 que, en el marco de una misión de esa cartera a la República Popular China, se concretó la apertura del mercado para arándanos frescos y arvejas secas argentinas, tras la firma de los respectivos protocolos sanitarios con la autoridad sanitaria china (AQSIQ).
"Estos acuerdos ratifican nuestro propósito de convertirnos en el supermercado del mundo mediante la apertura de más mercados, logrando de este modo, el impulso de nuestras economías regionales", se remarcó desde el Ministerio.
En la reunión con AQSIQ, durante la misión encabezada por la Secretaría de Mercados Agroindustriales a través del subsecretario de Mercados Agropecuarios, Jesús Silveyra, se realizó un repaso de la extensa agenda de negociaciones para el acceso de productos argentinos al país asiático.
En este sentido, "se lograron importantes avances con vista a alcanzar acuerdos en la adecuación del protocolo de carne vacuna enfriada y con hueso, carne ovina de la Patagonia, cerezas, trigo, ganado bovino en pie y carne porcina, entre otros", informó Agroindustria.
Un gran paso
El presidente de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (Apama), Alejandro Pannunzio, expresó, en diálogo con EL DIARIO RURAL, su satisfacción por la medida. "Afortunadamente, después de años de negociaciones, se logró la apertura para los arándanos argentinos y eso nos da la posibilidad de participar de un mercado que hoy tiene 300 millones de personas en la clase media, una clase media que, debido a que el ingreso per cápita sube a razón del 8,6% anual, puede crecer todavía más en número y consecuentemente en consumo", señaló.
Pannunzio calificó de "muy buena noticia" la apertura del mercado chino y "un gran paso hacia adelante". Advirtió, sin embargo, que todavía queda mucho trabajo por hacer para aprovechar esta medida debido a que la Argentina tiene en Perú y Chile a dos fuertes competidores. Estos dos países, explicó el presidente de Apama, entran con arancel 0 a China mientras Argentina debe pagar un arancel del 30%.
La cuestión arancelaria, precisamente, es uno de los temas sobre los que habrá que trabajar muy fuerte porque quita competitividad a los arándanos argentinos en los mercados internacionales. "Va a ser una cuesta muy difícil de remontar", graficó Pannunzio.
A las dificultades que presenta este arancel del 30% se suman los altos costos de la producción de arándanos en el país, básicamente los relacionados con la logística y la energía.
La falta de competitividad "nos preocupa muchísimo" desde "el tipo de cambio y los costos laborales -no los salariales- hasta el costo de la energía eléctrica que en Concordia es sideral comparado con otras provincias, como Corrientes por ejemplo", subrayó el dirigente.
Estas desventajas comparativas, no obstante, son en parte compensadas por la calidad de la fruta -"superfruta" la llaman sus productores- que se cultiva en Entre Ríos, dado que el departamento Concordia, capital del arándano en la provincia, es una zona con un potencial agroecológico altísimo, con abundante agua de calidad, y suelos arenosos que se comportan muy bien para el cultivo. Posee, además, una época de maduración muy buena para estar en los mercados internacionales en un momento adecuado para el Hemisferio Sur.
Hay también historia y cultura arandanera porque hace ya muchos años que se vienen produciendo arándanos en esa parte de Entre Ríos y los productores han aprendido de sus errores. En suma: existen condiciones favorables para aprovechar al máximo la oportunidad que ahora brinda China. "Lo que debemos hacer es trabajar sobre los puntos débiles que tenemos para tratar de resolverlos todos los actores privados y públicos del sector", exhortó el titular de Apama.
Junio
Pannunzio estimó que la llegada de los primeros arándanos entrerrianos a China podría producirse en junio próximo. Todo dependerá, claro, de cómo se desarrolle la próxima campaña arandanera en la provincia, de las condiciones climáticas básicamente.
En materia administrativa, en tanto, sólo falta fiscalizar algunos procedimientos fitosanitarios por parte de inspectores chinos, trámites que se concretarán cuando comience la temporada. "Se levantó la barrera y eso es lo importante. Ahora hay que trabajar sobre aranceles y costos, resolver los problemas de logística y mejorar aún más la calidad para llegar en las mejores condiciones a un mercado tan exigente como es China", subrayó Pannunzio, quien, además, instó a privados y gobiernos a aprovechar los próximos meses para llegar con todo listo.
El aeropuerto
El sector arandanero de la Mesopotamia viene reclamando desde hace tiempo la construcción de un aeropuerto internacional en Concordia, o la modernización del actual. Esta aspiración no sólo beneficiaría a este sector sino también a otras producciones o actividades económicas de la provincia y la región, y también a la ciudadanía en general.
"En nuestro caso, además, necesitaríamos que ese aeropuerto nuevo posea instalaciones adicionales, concretamente galpones acondicionados para preservar la calidad de la fruta. De esa manera podrían aterrizar en Concordia aviones cargueros -con una capacidad de entre 50 y 100 toneladas de frutas por viaje- que lleven nuestros arándanos directamente a países de alto consumo como es el caso de Estados Unidos", detalló Pannunzio, porque eso ayudaría a bajar costos de traslado y, sobre todo, preservar la calidad del arándano entrerriano que depende muchísimo de la cadena de frío.
Danilo Lima
