La multinacional Coca Cola invertirá en todo el año US$ 500 millones en la adquisición de 400.000 toneladas de materia prima en 14 provincias del país.
"Las economías regionales son un aliado fundamental de nuestro negocio. Sobre todo por lo que representamos en términos de compras de jugos concentrados, por la importancia que tiene la Argentina como proveedor de jugo a nivel mundial", indicó a Télam, el director de Asuntos Gubernamentales de Coca Coca, Cristian Pérez.
La actividad de Coca Cola influye en la decisión de compañías como Ledesma que tiene a la fabricante de bebidas sin alcohol como principal compradora del aceite de limón que produce en su planta de la provincia de Jujuy, junto al ingenio azucarero.
"Vamos a agregar 300 hectáreas a las 2.000 actuales que tenemos de producción de limón. Y además haremos una importante inversión para ampliar la fábricas de producción de jugos y de frutas", señaló a Télam el administrador general del Ingenio Ledesma, Fernando Gatti.
Las compras que Coca Cola hace a las economías regionales incluyen a una veintena de productores distribuidos en 14 provincias, donde la firma adquiere 37.000 toneladas de jugos concentrados de naranja, pomelo, limón, peras, manzanas, durazno y uva, a las cuales deben agregarse las compras que realiza de azúcar y jarabe de maíz.
"Las economías regionales son relevantes, sobre todo considerando la coyuntura y dado los importantes desafíos que atraviesan las provincias. Tenemos un compromiso para con ellas de trabajar articuladamente y creando valor en estas regiones", afirmó el ejecutivo de Coca Cola.
Estas adquisiciones que realiza la compañía son tan importantes que, en casos como el del jugo de naranjas, llegan a representar el 60% de la producción nacional al año, y en el de manzanas, el 43%.
También adquieren el 35% de la producción nacional anual de jugos de limón; 29% de zumos de pomelo; 18% de duraznos y 16% de la producción total de mostos concentrados de uva.
En el caso del jarabe de maíz, la fabricante de bebidas adquiere 188.000 toneladas anuales que significan el 55% de la molienda húmeda de este cultivo a nivel nacional.
Además compra 167.000 toneladas de azúcar al año, que equivalen a 7% del producido de cada zafra nacional.
"Nos abastecemos de pequeñas y medianas empresas nacionales, con lo cual son una parte importante del proceso de creación de valor económico y social. Es una cadena de valor que empieza en el agro y termina en la góndola", puntualizó Pérez.
De esta manera, Coca Cola invertirá este año US$ 250 millones en jugos concentrados; US$ 131 millones en jarabe de maíz; y US$ 115 millones en azúcar.
Esta operatoria no sólo impacta en los números de las producciones de las economías regionales y en el dinero que ingresa en ellas, sino también en el empleo, ya que unas 50.000 personas están afectadas indirectamente con la compañía.
"Es un tema muy importante en la coyuntura, en la cual el empleo es un gran tema de la agenda pública", señaló el ejecutivo.
En la producción frutihortícola, con alrededor de 44.000 trabajadores, y en la de azúcar, con otros 5.000, estos números representan el 10% del empleo total en estos sectores; en tanto que en la molienda húmeda de maíz, con alrededor de 1.000 puestos de trabajo, se alcanza a 55% del empleo indirecto.
"El plan de inversiones por US$ 1.000 millones a cuatro años está en linea y se está ejecutando. Incluye desde nuevas líneas de producción, una nueva planta de embotellamiento en la provincia de Corrientes, y la renovación de equipo de frío", remarcó Pérez.
Del total de los jugos concentrados adquiridos por Coca Cola, el 85% se exporta a 21 países que, a su vez, terminan abasteciendo globalmente al sistema de comercialización de bebidas de la empresa.
La empresa compra jugos concentrados de peras y manzanas a productores de las provincias de Neuquén y Río Negro; de uva en las de San Juan y Mendoza, siendo en esta última donde también adquiere de durazno; y jarabe de maíz, en Buenos Aires, Córdoba y San Luis.
También adquiere jugos concentrados de naranjas a quienes los producen en Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, Mendoza y Misiones.
Del mismo modo, hace con los jugos de limón en Salta y Tucumán; y con los de pomelo en Entre Ríos, Formosa, Jujuy y Misiones.
Por su parte, el azúcar es comprada en ingenios de las provincias de Salta y Tucumán.