En el último mes, el Senasa decomisó en la región más de tres toneladas de carne de distintos tipos de animales. En todos los casos, la mercadería secuestrada se encontraba en vehículos no habilitados para el transporte de alimentos, sin refrigeración ni documentación sanitaria.
Desde el organismo explicaron que este tipo de operativos se realiza no sólo para dar cumplimiento a la barrera sanitaria, que impide el ingreso a la Patagonia de carne con hueso para preservar la condición de libre de aftosa sin vacunación, sino también para evitar posibles riesgos a la salud de la población que pueda consumir esa carne.
Los decomisos más importantes se realizaron en el puesto Puente Dique Catriel. Allí, el 2 de junio se secuestraron 200 kilos de carne bovina con hueso, el 30 fueron otros 560 kilos del mismo tipo de carne y el 4 de este mes, 600 kilos.
El 9 de junio, en el puesto kilómetro 714 (cercano a Bahía Blanca) se incautaron 397 kilos de carne con hueso y menudencias; el 17, en puesto Pata Mora, 175 kilos de carne de chivo; y el 21 de junio, en el puesto 25 de Mayo, 365 kilos de menudencias crudas. El último decomiso corresponde al 6 de este mes en el control del puente Cipolletti-Neuquén, donde se secuestraron 900 kilos de carne con hueso.
En la mayoría de los casos se trata de gente que pretende vender carne traída desde La Pampa. Es más, en muchos casos los conductores de los vehículos eran comerciantes de la región dedicados al rubro de la carne.
La gran mayoría fue decomisada en el Puente Dique Catriel, aunque en la Ruta 22 entre Cipolletti y Neuquén se dio uno de los golpes más grandes, con 900 kilos.